La CNMC considera acreditado que, al menos desde 2009 y hasta 2013, varios concesionarios independientes de la marca Nissan, todos ellos con sede social en la Comunidad de Madrid, habrían acordado en diferentes reuniones, con la participación de Nissan Iberia y la de A.N.T Servicalidad y Horwath Auditores España, S.L.P (empresas estas dos últimas de consultoría estratégica) […]
Dirigentes Digital
| 05 sep 2016
La CNMC considera acreditado que, al menos desde 2009 y hasta 2013, varios concesionarios independientes de la marca Nissan, todos ellos con sede social en la Comunidad de Madrid, habrían acordado en diferentes reuniones, con la participación de Nissan Iberia y la de A.N.T Servicalidad y Horwath Auditores España, S.L.P (empresas estas dos últimas de consultoría estratégica) descuentos aplicables a ciertos nuevos modelos de automóviles.
De esta forma, empresas competidoras adoptaron un acuerdo, intercambiando información estratégica y comercialmente sensible, para fijar descuentos y condiciones comerciales, y homogeneizaron las condiciones de comercialización en la venta de vehículos nuevos de la marca Nissan en la Comunidad de Madrid. Ello supuso una restricción de la competencia en el sector de la distribución minorista de vehículos de esa marca, con el consiguiente perjuicio para los consumidores de la zona, explica el regulador.
Para hacer un seguimiento del cumplimiento de los acuerdos adoptados por el cártel y de sus incumplimientos, los concesionarios contrataron a dos empresas externas: A.N.T. Servicalidad y Horwath Auditores España, cuyo cometido era controlar el cumplimiento de los acuerdos previamente adoptados por las empresas participantes en el cártel.
En el caso de Horwath, elaboraba el denominado "Protocolo de Revisión", con las condiciones pactadas en las reuniones para los modelos sujetos a acuerdo, que enviaba a ANT, y revisaba los expedientes de venta de los concesionarios partícipes, con carácter mensual.
Por su parte, A.N.T Servicalidad S.L, además de evaluar la atención al cliente de las empresas que contrataban sus servicios, mediante la figura del "comprador misterioso", realizaba para los concesionarios distintos servicios, facturados como "estudios de mercado". El ellos incluía apartados relacionados con la atención recibida por parte del comercial de cada concesionario, anotaciones sobre la negociación de precios y la oferta económica finalmente conseguida, datos que eran trasladados a las empresas partícipes en el acuerdo.
La CNMC ha dictado a lo largo de 2015 y 2016 otras resoluciones sancionadoras contra otros concesionarios por conductas similares. También en esos casos, la participación de las mismas o una de las empresas independientes de consultoría ahora sancionadas, contratadas por los propios concesionarios, fue determinante para evaluar el seguimiento de los acuerdos en el seno del cártel.Entre la red de concesionarios sancionada figuran marcas como Toyota, Opel, Hyundai, Land Rover, Audi, Seat, Volkswagen, Chevrolet y Volvo.