La nueva cruzada del regulador es la defensa de las estaciones de servicio desatendidas ante las limitaciones que están ejerciendo las Comunidades Autónomas a favor de las gasolineras tradicionales. El organismo presidido por José María Marín Quemada defiende que su introducción en el mercado favorece la competencia beneficiando al consumidor. Critica duramente la reacción de las algunas Comunidades Autónomas que tratan de limitar su desarrollo.
Entre los argumentos que maneja la CNMC se encuentra en el impacto de los precios de los carburantes. "Si hablamos del precio en estas gasolineras automáticas, un estudio para la Comisión Europea detectó que los precios medios son alrededor de un 2% más baratos respecto a las estaciones de servicio atendidas. Para España, el precio de la gasolina 95 era 2 céntimos inferior (1,4%) y el del gasóleo, 4 céntimos (-3%)", indica en la web. Además de afirmar que si se duplican el número de gasolineras sin personal en un barrio o localidad suponía, de media, una reducción de 22 céntimos el litro en esa zona.
Competencia, aparte de las consecuencias en los precios, incide en otros aspectos centrados en el supuesto peor servicio que prestan a los consumidores. "Este tipo de gasolineras no tienen por qué ser más inseguras que las gasolineras que cuentan con personal. La mayor parte de las cooperativas llevan actuando en régimen de estaciones de servicio desatendidas desde hace años, sin que se haya tenido conocimiento de accidentes graves ni tengan una mayor propensión a los accidentes como consecuencia de la falta de personal que las estaciones con personal. De hecho, en ocasiones, la automatización del cierre del suministro puede funcionar con mayor velocidad que un humano", afirman desde la web.
Uno de los argumentos utilizados por las gasolineras tradicionales para atacar a sus nuevos competidores es la destrucción de empleo. Competencia contraataca explicando que la mayor parte de las
empresas que están instalando gasolineras automáticas son de nueva creación, "empresas innovadoras, algunas de las cuáles pueden tener la consideración de startups, defendiendo de forma decidida la competencia en el mercado y la mejora de la eficiencia en la puesta a disposición del producto creando empleo de calidad". El regulador cree que se fomenta el empleo de valor añadido.
Además desmiente la creencia de que el consumidor está desprotegido con este deservicio. "Un informe para la Comisión Europea analizó las quejas de los usuarios de las gasolineras desvelando que únicamente el 10% de los clientes tuvo problemas en una gasolinera desatendida y no pudo dar con una persona responsable, el 90% restante de las quejas de los consumidores están relacionadas con otros problemas, particularmente el precio del carburante y el tiempo de espera para repostar".
Competencia sí admite que el servicio de las estaciones sin personal es deficiente para las personas con discapacidad, pero indica que las gasolineras tradicionales seguirán existiendo. "Se trata de competir, no de sustituir unas gasolineras por otras, en ningún país de la Unión Europea han desaparecido las gasolineras atendidas", asevera el nuevo informe y aconseja seguir trabajando para mejorar las instalaciones sobre accesibilidad.