La falta de Gobierno no servirá de excusa para librarse de los ajustes de 2017 exigidos por la Unión Europea. A pesar de haberse librado de la multa por el incumplimiento del déficit por 2015 y flexibilizar los objetivos para los dos próximos años, el país sigue en procedimiento de déficit excesivo que tiene abierto […]
Dirigentes Digital
| 14 oct 2016
La falta de Gobierno no servirá de excusa para librarse de los ajustes de 2017 exigidos por la Unión Europea. A pesar de haberse librado de la multa por el incumplimiento del déficit por 2015 y flexibilizar los objetivos para los dos próximos años, el país sigue en procedimiento de déficit excesivo que tiene abierto a España. Con lo que será ineludible que el nuevo Gobierno que se pueda formar a corto, medio y largo plazo retoque los presupuestos que se envíen hoy con nuevos recortes en gastos o subida de impuestos. “Vamos a mandar un presupuesto sin modificaciones de política fiscal”, confirmó el responsable de Economía, Luis de Guindos al finalizar el Ecofin, la reunión de los 28 Ministros de Finanzas de la UE. El ministro en funciones desveló que las cuentas se ajustarán al cuadro económico con las proyecciones de las variables de tipos de interés, cruce de divisa y petróleo, pero no arrojó luz sobre como quedarían los objetivos de deuda y deuda. De Guindos confía que la desviación de 2016 quede corregida con la reforma del Impuesto de Sociedad para aumentar la recaudación en 8.000 millones de euros. No está claro que sea suficiente para contentar a Bruselas. De momento, se han mostrado compresivos, pero en el aire está la congelación de los fondos estructurales. España puede dejar de disponer de hasta 1.300 millones de euros. El comisario de Economía, Pierre Moscovici, en el pasado Ecofin advirtió de que “la decisión de suspender no es una opción para nosotros, sino una obligación” y la decisión se tomará con las cifras de 2016, dependiendo de si España cumple con el objetivo de bajar el déficit al 4,6%.