La Coordinadora del Grado de Derecho y del Máster en Abogacía y Práctica Jurídica de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), Yolanda García, ha asegurado hoy que la socialización del uso de Internet y el incremento de las transacciones electrónicas "han dado lugar a nuevas y sofisticadas formas de suplantar la identidad". De esta manera, […]
Dirigentes Digital
| 09 mar 2015
La Coordinadora del Grado de Derecho y del Máster en Abogacía y Práctica Jurídica de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), Yolanda García, ha asegurado hoy que la socialización del uso de Internet y el incremento de las transacciones electrónicas "han dado lugar a nuevas y sofisticadas formas de suplantar la identidad".
De esta manera, García ha explicado que la suplantación de identidad más grave es la "usurpación de estado civil", un delito tipificado en el artículo 401 del Código Penal en el que se condena el "fingirse otra persona para usar sus derechos, suplantar su filiación, su paternidad, sus derechos conyugales, con el ánimo de sustituirse por otra persona real y verdadera", con el fin de "usar los derechos y acciones de la personalidad sustituida".
Es decir, estaríamos hablando de una usurpación "completa" que puede acarrear penas de entre seis meses y 3 años de cárcel.
En los últimos años las denuncias por suplantación de identidad se han incrementado en más de un 200% en el caso de sectores como el del suministro y comercialización de energía y agua y más de un 90% en el caso de las telecomunicaciones.
El mayor número de denuncias están relacionadas con empresas de suministro en las que un encargado recopila los datos de nuevos clientes que luego son dados de alta por un tercero.
Así, entre las nuevas formas de suplantación online encontramos el Phising, que hace referencia al fraude mediante la "pesca de contraseñas" ("password harvesting fishing", cosecha y pesca de contraseñas).
El objetivo es la obtención de información personal confidencial, ya sean cuentas bancarias, contraseñas o tarjetas de crédito.
Para ello, el phisher actúa de varias formas para conseguir la información, ya sea mediante el envío de mensajes de correo electrónico fraudulentos, mensajería instantánea o mediante la utilización de falsos sitios web.
El Scam es un nuevo formato de fraude consistente en la creación de empresas ficticias que captan personas mediante la promesa de un puesto de trabajo con excelentes ventajas.
En ocasiones estas personas desconocen el carácter ilícito de sus acciones que consisten en el blanqueo de dinero obtenido a través del phishing.
Uno de los fraudes más estandarizados es el Hoax, mensajes engañosos o bulos que se distribuyen en cadena y abarcan distintos temas como el solidario o las advertencias de virus informáticos con el fin de conseguir direcciones de correo electrónico, colapsar servidores o atemorizar al receptor.
En cuanto al Spoofing, se trata de una suplantación de identidad (de códigos IP, GPS, Web) en la que, por lo general, no se requiere de un engaño previo a la víctima y que suele requerir de altos conocimientos tecnológicos por parte del defraudador.
Los motivos del mismo pueden ser muy variados, desde la estafa hasta la investigación.
Recomendaciones
Para evitar ser víctima de estas situaciones es recomendable no compartir los documentos personales en una red local, ni enviar datos confidenciales por correo electrónico.
Además es muy importante tener cuidado con las redes Wifi a las que nos conectamos porque "si no están debidamente protegidas cualquier persona puede capturar información que enviemos por medio de nuestro equipo o smartphone".
En el Grado de Derecho de la VIU se abordan las diferentes maneras de denunciar este tipo de situaciones.
De cualquier manera, ha añadido, la mejor manera de "evitar la suplantación de identidad por Internet es el Certificado Digital, un DNI único, unipersonal e intransferible avalado por una entidad de certificación, cuyo objetivo es establecer confianza en las transacciones electrónicas".