En los últimos años los inversores se han mostrado dispuestos a asumir más riesgos para cosechar mayores rentabilidades de sus inversiones, mientras que las políticas monetarias acomodaticias (esto es, las compras de deuda por parte de los banco centrales conocidas como flexibilización cuantitativa o QE) y los bajos tipos han sostenido la liquidez del mercado. […]
Dirigentes Digital
| 07 oct 2015
En los últimos años los inversores se han mostrado dispuestos a asumir más riesgos para cosechar mayores rentabilidades de sus inversiones, mientras que las políticas monetarias acomodaticias (esto es, las compras de deuda por parte de los banco centrales conocidas como flexibilización cuantitativa o QE) y los bajos tipos han sostenido la liquidez del mercado.
Sin embargo, subraya el organismo capitaneado por Christine Lagarde, los "cambios estructurales, como una base menos diversa de inversores, la proliferación de pequeñas emisiones de bonos y la reducción de la negociación de los bancos, sugieren que una vez que comiencen la subidas de tipos, la liquidez probablemente se reducirá".
Por tanto, señala que una normalización de las políticas monetarias "tranquila" es "crucial" para evitar "cambios repentinos y perjudiciales en la liquidez del mercado". Pues la iliquidez eleva la volatilidad de los precios de los activos, que divergen más de la evolución económica, y hace que la transferencia de fondos entre ahorradores y prestamistas sea menos eficiente. Un contexto en el que los inversores pueden posponer sus decisiones de inversión y en el que el crecimiento económico sufriría.
"Factores como el mayor apetito por el riesgo y los bajos tipos han enmascarado la fragilidad subyacente de la liquidez del mercado" recientemente, advierte Gaston Gelos, jefe de la división de análisis de estabilidad financiera global del FMI. Así, si las condiciones financieras empeoran o los inversores se cansan de una clase particular de activos, la liquidez puede "evaporarse rápidamente".
Además, los cambios en la liquidez del mercado en un tipo de activo parece extenderse a otros con más frecuencia, y los mercados de high yield y de bonos emergentes muestran señales ya de deterioro en este sentido.
"Es crucial que continuemos con las reformas en la infraestructura del mercado para mejorar la capacidad de recuperación de la liquidez, garantizando, por ejemplo, la igualdad de acceso a las plataformas de trading electrónico o respaldando la estandarización de los instrumentos de comercio", concluye Gelos. Por su parte, los bancos centrales y supervisores financieros deben estar preparados para episodios de crisis de liquidez, desarrollando estrategias preventivas para hacer frente a la inestabilidad generada por los mismos.
José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España, añade: "Todos los que trabajamos en el mercado hemos sido conscientes de que la liquidez, al final la normalidad del mercado, está en riesgo una vez que las medidas excepcionales y al límite en la política monetaria desaparezcan. Aunque esto ahora nos parezca muy lejano. O cada vez más lejano, como el debate actual sobre el inicio de la subida de tipos desde la Fed y el Banco de Inglaterra" (BoE por su siglas en inglés).