La subida del euro frente al dólar demuestra el impacto de las últimas actas de la Fed, que han dejado claro que la primera subida de tipos no se producirá en junio, pues los datos disponibles hasta el momento no justifican dicha medida. En este sentido, dentro del seno de la Fed se discute activamente […]
Dirigentes Digital
| 21 may 2015
La subida del euro frente al dólar demuestra el impacto de las últimas actas de la Fed, que han dejado claro que la primera subida de tipos no se producirá en junio, pues los datos disponibles hasta el momento no justifican dicha medida. En este sentido, dentro del seno de la Fed se discute activamente sobre si la debilidad del primer trimestre es transitoria o no. Con todo, las Actas muestran que los riesgos a la baja de la inflación son menores, aunque existe mayor desconfianza sobre el entorno internacional.
Asimismo, reconocen que existe el riesgo de que aumente la volatilidad en los mercados una vez se materialice el repunte de los tipos. Podremos tener más "pistas" sobre la postura de la Fed este viernes, cuando su presidenta, Janet Yellen, ofrecerá un discurso sobre la situación de la economía de Estados Unidos.
Mientras tanto, en Atenas, el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, ha reiterado que el próximo cinco de junio, cuando debe hacer frente al siguiente pago del Fondo Monetario Internacional (FMI) dará preferencia al abono de pensiones y salarios públicos frente a este. José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España, concluye: "Si el Eurogrupo acepta este ultimátum sin garantías de llevar a cabo un programa, no es sólo una cuestión de credibilidad que a la larga puede pasar factura al euro, como que a corto plazo puede generar más incertidumbre política en los socios que tienen elecciones a corto plazo. Si no lo acepta, el default es más que probable lo que llevaría a abrir nuevos interrogantes que van más allá sobre la ‘solución chipriota’, inestabilidad política interna y un debate abierto ya sobre su salida del euro".
Link Securities añade: "Los inversores siguen apostando por un acuerdo de última hora, algo que cada vez se nos antoja más complicado dado que el tiempo se agota y las posturas de ambas partes en algunos temas siguen muy distantes. De momento se descarta que en la Cumbre de líderes de la Unión Europea (UE) que se inicia este jueves en Riga (Letonia) se alcance acuerdo alguno, aunque estamos convencidos de que se ‘generarán’ múltiples declaraciones sobre Grecia y el estado de las negociaciones durante los dos días que dura la misma. Habrá que estar atentos a dichos comentarios ya que pueden tener impacto en la marcha de los mercados de renta variable y de bonos europeos".
De momento, el Banco Central Europeo (BCE) ha aumentado en tan sólo 200 millones de euros la liquidez de emergencia (ELA) a la banca griega. Se trata del menor aumento semanal de los últimos meses, tras el cual el saldo disponible actualmente asciende a los 80.200 millones. No se han producido novedades en torno ni aumentos de la base de papel de contrapartida.
Precisamente, el organismo presidido por Mario Draghi ha presentado hoy sus actas, una práctica que ha iniciado este año imitando los modelos de otros bancos centrales como la Fed o el Banco de Inglaterra. En ellas, los miembros del banco central reafirman el positivo impacto de las políticas adoptadas sobre los mercados financieros, dejando claro que las compras de deuda continuarán hasta, al menos, septiembre de 2016.
El miembro francés del comité ejecutivo del BCE, Benoît Coeuré, dijo al presentar una revisión de los acontecimientos en los mercados financieros que la media diaria de las compras de deuda pública ascendió a 3.200 millones de euros. El BCE ha adquirido hasta el 15 de mayo deuda pública por valor de 122.405 millones de euros.
Coeuré añadió en la última reunión de política monetaria del BCE que "las preocupaciones de algunos participantes del mercado sobre que el BCE tendría dificultades para lograr sus objetivos de compra no se han materializado hasta ahora".
El BCE quiere comprar deuda pública y privada por valor mensual de 60.000 millones de euros hasta finales de septiembre de 2016 y, en cualquier caso, hasta que la inflación de la zona del euro suba hasta cerca del 2 %.
A nivel macro, jornada de PMIs a lo largo y ancho del planeta. En China, se amplia la recesión en el sector manufacturero, al caer este indicador a niveles de 49,1, por debajo del 49,3 previsto y del umbral de 50 que indica expansión. Sin embargo, como "no hay mal que por bien no venga", el mercado ha interpretado este dato como un "apoyo" más a nuevas medidas de estímulo por parte de su banco central.
En el Viejo Continente, el PMI manufacturero aumenta en Francia (hasta 49,3; nivel más alto en doce meses) y también el servicios (51,6); por el contrario, el primer indicador sorprende a la baja en Alemania (51,4) y se modera también el segundo (52,9). Finalmente, en el conjunto de la Zona Euro, el PMI manufacturero supera las expectativas (52,3), pero tanto el servicios (53,3) como el compuesto (53,4) defraudan al mercado.
En este contexto, el euro recupera los 1,11 dólares y el Tesoro de España ha colocado 5.509 millones de euros en deuda a medio y largo plazo. Parte alta del objetivo que se había marcado de entre 4.500 y 5.500 millones de euros, aunque con subida de los costes. Por su parte, el petróleo escala posiciones con el Brent en niveles de 65 dólares por barril y el West Texas en la zona de los 59.