Desde el Instituto BBVA de Pensiones han elaborado un decálogo para el ahorrador, con 10 puntos clave que todo inversor debe tener claro en el nuevo escenario en el que se mueven los mercados financieros. 1. Pasamos de certeza a las expectativas El ahorrador debe tener claro que los tiempos de rentabilidades ciertas han terminado, […]
Dirigentes Digital
| 18 jul 2016
Desde el Instituto BBVA de Pensiones han elaborado un decálogo para el ahorrador, con 10 puntos clave que todo inversor debe tener claro en el nuevo escenario en el que se mueven los mercados financieros.
1. Pasamos de certeza a las expectativas
El ahorrador debe tener claro que los tiempos de rentabilidades ciertas han terminado, y que la rentabilidad dependerá de los aciertos y errores en la gestión.
2. Debemos aprender a convivir con el riesgo
Los productos sin riesgo no ofrecen rentabilidades atractivas. La clave estará en encontrar el equilibrio entre la tolerancia al riesgo y las expectativas de rentabilidad del inversor.
3. La gestión activa toma más valor
La gestioón activa implica un continuo ajuste de los valores que componen las carteras. Para obtener las rentabilidades deseadas, el ahorrador debe ampliar su horizonte de inversión, de tipos de activos y de mercados donde colocar su dinero.
4. Es importante conocerse bien
La gestión adecuada será aquella en la que la cartera de inversión del cliente se corresponda con su perfil de riesgo, sus objetivos de medio y largo plazo y su horizonte temporal de inversión.
5. El asesoramiento es la clave
Los expertos abogan por la búsqueda de asesoramiento personalizado, para encontrar la combinación más adecuada de riesgo/rentabilidad para cada cliente.
6. Estableciendo objetivos de largo plazo
Desde el Instituto apuestan por un cambio de mentalidad, en el que las rentabilidades "fáciles, rápidas y sin esfuerzo" den paso a una visión a largo plazo.
7. Debemos ahorrar para el futuro
Los tipos bajos y la creciente longevidad imponen un enfoque de largo plazo en el ahorro. Por eso, aconsejan plantear dicho ahorro buscando un complemento de ingresos a la prestación social que se recibe tras la jubilación.
8. Buscando generar rentas periódicas
En momentos de incertidumbre de mercado, la liquidez que las rentas del ahorro aportan a las carteras se convierte en un factor muy importante que transmite tranquilidad. Las rentas del ahorro generan recurrencia, ya que permiten disfrutar de pequeños ingresos periódicos con los que afrontar cualquier imprevisto.
9. Sin olvidar la disciplina del ahorro
Ahorrando poco a poco, de manera constante, se consigue ver crecer el capital en el largo plazo, sin que el esfuerzo resulte excesivo. Además, desde el Instituto insisten en que invertir periódicamente sirve para suavizar las alzas y caídas a lo largo del tiempo. El éxito reside en darle a la inversión el tiempo que necesita para crecer.
10. La ecuación básica de nuestras finanzas ha cambiado
Hasta ahora, la ecuación para el ahorro era simple: Ingresos-Gastos=Ahorro. A juicio de los expertos, esta ecuación ya no es válida, dando como resultado el nuevo paradigma del ahorro: Ingresos -Ahorro = Gastos. Es decir: gastaremos lo que nos sobre de nuestros ingresos después de ahorrar.