Al mercado no le gustan ni las incertidumbres, ni las cuentas poco claras. Además, la sombra de las últimas empresas con problemas en sus cuentas todavía sobrevuela el mercado, véase el caso de falsedad de Gowex o de los problemas de financiación de Codere. En este contexto, la presentación de los resultados de la compañía […]
Dirigentes Digital
| 14 nov 2014
Al mercado no le gustan ni las incertidumbres, ni las cuentas poco claras. Además, la sombra de las últimas empresas con problemas en sus cuentas todavía sobrevuela el mercado, véase el caso de falsedad de Gowex o de los problemas de financiación de Codere. En este contexto, la presentación de los resultados de la compañía ha despertado dudas entre los inversores lo que se ha saldado con una caída que ha llegado a ser del 35%. Un desplome que se suma a la caída de la sesión anterior cuando los títulos cerraron con una bajada del 18% y que lleva a que las acciones de la empresa entren en números rojos en el acumulado del año.
"No son pocos los motivos que explican esta caída. Principalmente tenemos el anuncio de la empresa de que no podrá cumplir sus objetivos para los próximos ejercicios. Por otro lado, los resultados presentados recientemente hacen que veamos un claro estancamiento de las ventas. A pesar de que los beneficios han subido un 38%, el hecho de que la cifra de negocio no haya sido tan alta como se esperaba ha hecho que los inversores hayan castigado a la compañía", explica Rodrigo García, analista de XTB.
Los especuladores están además al acecho de la compañía, según explican los analistas. "Las expectativas bajistas para Abengoa no son un hecho reciente. De un tiempo a esta parte, ha pasado a ser, con diferencia, la compañía del Ibex con más posiciones cortas en su capital, llegando por momentos a representar más de un 7% de su capital. Incluso en los tiempos en los que Abengoa subía como la espuma, el porcentaje de cortos en la compañía era casi el doble que la segunda empresa en este valor", asegura García.
La respuesta de la empresa
La empresa para contestar al mercado se ha apresurado a enviar a la CNMV una ampliación de la explicación de sus cuentas para tratar de aclarar la situación de su deuda. En este documento explican cómo han contabilizado un bono verde y sus garantías. "Abengoa (sociedad matriz) emitió un bono verde el 30 de septiembre de 2014 a través de su filial Abengoa Greenfield (el "Green Bond"). Este bono verde está garantizado por Abengoa y otras filiales de su grupo, de la misma manera que se garantizan el resto de las emisiones de bonos high yield emitidos por Abengoa Finance", apuntan al hablar de cómo ha sido el proceso de emisión.
A lo que añaden que las garantías subsisten durante toda la vida del bono verde. Sin perjuicio de lo anterior, asegura, el bono verde ha sido contabilizado como "deuda sin recurso en proceso" en los estados financieros de 30 de septiembre de 2014 dado que están destinados a servir de puente a la financiación a largo plazo sin recurso asumida en proyectos verdes, y, por ello, consistente con el tratamiento contable aplicado a los proyectos sin recurso. La caja no puede, por ello, utilizarse para ningún otro propósito corporativo. La Sociedad tiene contabilizados 1.592 millones de euros de financiación puente bajo esta clasificación a 30 de septiembre de 2014.