Las primeras noticias sobre este acercamiento entre ambos adversarios se conocieron a inicios de julio. "Washington y Caracas iniciaron uno de los diálogos más amplios en años en un intento por mejorar sus ásperas relaciones", decía un despacho de la agencia Reuters, atribuyendo la información a "un funcionario de alto rango de Estados Unidos". "El […]
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| 27 jul 2015
Las primeras noticias sobre este acercamiento entre ambos adversarios se conocieron a inicios de julio. "Washington y Caracas iniciaron uno de los diálogos más amplios en años en un intento por mejorar sus ásperas relaciones", decía un despacho de la agencia Reuters, atribuyendo la información a "un funcionario de alto rango de Estados Unidos".
"El esfuerzo del Gobierno latinoamericano más fervientemente crítico de Washington y un importante proveedor de petróleo de Estados Unidos se da en momentos en que el presidente Nicolás Maduro lucha con una economía en problemas", contextualizaba el reporte.
La Venezuela de Maduro es heredera de los planes trazados por Hugo Chávez, el militar que se erigió en estandarte del "socialismo del siglo XXI" promoviendo la llamada ‘revolución bolivariana’. Chávez, llamado por sus discípulos ‘comandante’, solía pronunciar encendidos discursos contra el país que es símbolo del capitalismo.
Caribe rojo
Alineado ideológicamente con Fidel Castro y su hermano Raúl, el venezolano gozó de grandes masas de dinero provenientes de la principal actividad económica de su país: la explotación petrolera.
Con la fuerte caída de precios del crudo en el mercado internacional, los ingresos del país caribeño fueron menguando, al punto que en los últimos meses el cuadro económico se ha fragilizado drásticamente, llegando al punto de desabastecimientos de productos básicos, como alimentos y medicinas.
Paralelamente, el país fue siendo tomado por manifestaciones en contra y a favor del régimen a medida que la situación económica iba agravándose, reflejándose ello también en un endurecimiento del Gobierno de Maduro en materia de seguridad.
En el marco del acercamiento que iniciaron Estados Unidos y Cuba en diciembre del año pasado, comenzó a tomar forma, según las fuentes citadas por la agencia, un proceso de acuerdo entre Washington y Caracas. Maduro dio el primer paso en marzo de este año al solicitar un "canal directo de comunicación" con el presidente Barack Obama y el Departamento de Estado, de acuerdo con la fuente.
El venezolano "se dio cuenta de que si podemos hablar con los cubanos, podemos hablar con él", dijo el funcionario norteamericano que comentó el proceso. "Lo abordamos con mucha cautela porque ya habíamos visto esto antes", agregó.
Diplomacia azul
Tras la reapertura recíproca de representaciones diplomáticas entre la isla comunista y el imperio capitalista el 20 de julio, no hubo más noticias sobre este proceso diplomático entre Venezuela y Estados Unidos, a pesar de que el país de Maduro aplaudió el acuerdo que la potencia norteamericana celebró con Irán en materia nuclear.
"Felicitamos sinceramente a las partes involucradas por esta victoria de la diplomacia y la paz contra la guerra y la intolerancia", señaló el embajador venezolano en Naciones Unidas, Rafael Ramírez.
La situación económica, en tanto, continúa incierta, con una inflación que en los últimos tres años viene creciendo sostenidamente, siendo la más alta del mundo. En 2013 fue del 56,2%, en 2014 del 68,5% y en 2015 podría cerrar por encima del 150%, de acuerdo con analistas privados.
Cuba, a su vez, salió en busca de otros horizontes en materia económica, lo que queda evidenciado en su histórico acercamiento con su antiguo enemigo, lo que, al mismo tiempo, aumenta el aislamiento de la República Bolivariana de Venezuela.
