Las carreras en España se han convertido en una afición multitudinaria. Se calcula que sólo en un fin de semana se organizan cerca de 100 por todo el territorio. Si sacamos una media, el resultado son 5.000 a lo largo del el año. 5.000 carreras aproximadamente que mueven una enorme cantidad de dinero, aunque muchas […]
Dirigentes Digital
| 31 mar 2015
Las carreras en España se han convertido en una afición multitudinaria. Se calcula que sólo en un fin de semana se organizan cerca de 100 por todo el territorio. Si sacamos una media, el resultado son 5.000 a lo largo del el año.
5.000 carreras aproximadamente que mueven una enorme cantidad de dinero, aunque muchas de ellas tengan un trasfondo social, y casi siempre se corre por una buena causa. Aun así, el negocio del running mueve 300 millones de euros al año, y además es el mejor escaparate para patrocinadores y empresas organizadoras. Las grandes compañías de nuestro país lo saben y han pasado a tener las carreras como primera preferencia en la lista de tareas para mejorar su imagen de marca.
Isabel Muñoz Rojas es directora de grandes cuentas de You First Sports, multinacional española de Representación de Deportistas y Marketing Deportivo y directora general de You First Sports Running, división de la compañía encargada exclusivamente de la organización y gestión de carreras.
Según Isabel, cada vez más, vivimos en un mundo de constante estrés y sedentarismo. "El running ha surgido como respuesta a muchos de los problemas sociales que nos amenazan día a día." Para ella, la práctica de este deporte, que aún no se sabe cuando dejará de aumentar, se ha visto favorecida por el escenario de crisis que existe en nuestro país. "La logística es muy sencilla y se traduce en una serie de ventajas económicas y sociales al alcance de la mayoría. Se trata de un deporte muy barato que puede practicarse en cualquier lugar, para el que solo se necesitan unas zapatillas, y abierto a todo tipo de personas: mujeres, hombres, niños…" Comenta la directora de You First Sports Running.
Y es que, para Isabel, una de las mejores cosas que tiene este deporte es que "no atiende a desigualdades", puede ser practicado por todos, y de hecho, cada vez hay más mujeres que corren y todas las carreras que se organizan, sobre todo a nivel empresarial o solidario, pueden competir tanto hombres como mujeres, sin distinción de ningún tipo.
A nivel empresarial, el running también se está convirtiendo en una pieza importante de cara a la estrategia de la compañía. Este deporte es el nuevo filón utilizado por las marcas para mejorar su imagen y autopromocionarse. A parte de ser porque muchos directivos también están ‘enganchados’ al running para canalizar el estrés diario, según Isabel, esto se da porque, "Las marcas han encontrado en este movimiento una forma de asociar a la imagen de la compañía los valores del running: el sacrificio, el esfuerzo, la constancia o el afán de superación".
"Organizar una carrera otorga a las empresas la capacidad de posicionar la marca en ámbitos deportivos y saludables, y les proporciona una vía eficaz para interactuar con los consumidores de manera no intrusiva en sus momentos de ocio." Comenta Isabel que añade que, para las marcas es importante además activar bien su participación en la carrera, "de modo que la acción no se limite sólo a la organización del evento, sino que se convierta en una vía para interactuar con los participantes antes, durante y después de la carrera". Hoy en día existen herramientas de marketing suficientes para hacerlo, y en You First Running trabajan con este objetivo.
Dentro de You First Sports, Isabel Muñoz Rojas además de dar servicio a clientes como Bifrutas, Herbalife, Oscar Mayer (Campofrío), Reale Seguros o Gas Natural Fenosa, es la encargada de la relación con la Real Federación Española de Golf, la comercialización y gestión de sus patrocinadores y la organización del Open de España Masculino. Además del running, "el golf es una herramienta perfecta para interactuar con los clientes, captarlos, fidelizarlos…pasarse 4 ó 5 horas en el campo compartiendo alegrías y penas… ¡no tiene nada que ver con una reunión en la oficina!" concluye Isabel.