El cruce de civilizaciones impregna cada uno de sus rincones de sus particulares y especiales calles. Muy cerca de estas zonas más emblemáticos están situados los hoteles América Sevilla y Derby Sevilla, dos establecimientos que ponen a disposición de los clientes sus céntricas instalaciones en las que predominan la comodidad, el confort, los amplios espacios […]
Dirigentes Digital
| 11 may 2016
El cruce de civilizaciones impregna cada uno de sus rincones de sus particulares y especiales calles. Muy cerca de estas zonas más emblemáticos están situados los hoteles América Sevilla y Derby Sevilla, dos establecimientos que ponen a disposición de los clientes sus céntricas instalaciones en las que predominan la comodidad, el confort, los amplios espacios y la calidad del descanso, y que son el mejor punto de partida para recorrer los rincones más espectaculares de la ciudad del Guadalquivir.
Una visita fugaz de dos días y una noche a Sevilla es tiempo suficiente para conocer sus lugares más turísticos.
La ruta comienza en la Catedral de Sevilla, ubicada en la plaza del Triunfo. Se trata de la catedral gótica cristiana con mayor superficie del mundo y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Junto a ella, se encuentra La Giralda, el campanario de la Catedral, de 104 metros de altura, uno de los símbolos más emblemáticos de la ciudad. Muy cerca de allí, el turista también podrá visitar el Archivo de Indias, edificio en el que se conserva toda la documentación referente a las colonias españolas durante el descubrimiento de América.
El Real Alcázar de Sevilla es un lugar de parada obligada. Allí está situado un complejo palaciego mudéjar rodeado de jardines, cuyo conjunto también fue declarado Patrimonio de la Humanidad. Otra visita indispensable es la de Iglesia de San Salvador, ubicada en la plaza que lleva el mismo nombre, y es la segunda iglesia más grande e importante de Sevilla, después de la catedral.
Una de las mejores zonas para comer es el barrio de Santa Cruz. Esta emblemática zona sevillana está repleta de bares de tapas en los que degustar las clásicas recetas andaluzas y de calles muy particulares sevillanas.
El pulmón verde de Sevilla está representado por el Parque de María Luisa. Está formado por los jardines privados del Palacio de San Telmo, los cuales fueron donados al pueblo por la Infanta María Luisa Fernanda de Borbón en 1893 para que todo el mundo pudiera disfrutar de ellos. En su interior se ubica la Plaza de España (de 200 metros de diámetro) y en la que habitualmente se realizan concentraciones de todo tipo.
Otro de los monumentos importantes es la Torre del Oro de Sevilla, situada en el margen izquierdo del río Guadalquivir, junto a la plaza de toros de la Real Maestranza. Después, lo recomendable es dar un tranquilo paseo por la orilla del río e incluso sentarse a descansar.
Otro buen lugar para hacer un alto en el camino es el famoso barrio de Triana. Es uno de los más antiguos de la ciudad, antaño ocupado por marineros y hoy conocido por ser una de las cunas del flamenco.
Después de un día completo de turismo y gastronomía, las mejores opciones para descasar son los hoteles América Sevilla o Derby Sevilla, situados en el centro de la capital andaluza.
Ambos establecimientos cuentan con las máximas comodidades para el huésped que quiere conocer y vivir la ciudad desde el propio corazón de Sevilla.