Isabel dos Santos desde el principio se ha opuesto a las condiciones de la OPA de CaixaBank por BPI. Ha esperado a que el banco español eleve su oferta de 1,32 euros por acción para ceder el control de la entidad lusa. A través de Santoro, el brazo inversor por el cual ostenta el 18,6% del […]
Dirigentes Digital
| 10 abr 2015
Isabel dos Santos desde el principio se ha opuesto a las condiciones de la OPA de CaixaBank por BPI. Ha esperado a que el banco español eleve su oferta de 1,32 euros por acción para ceder el control de la entidad lusa. A través de Santoro, el brazo inversor por el cual ostenta el 18,6% del capital, ha intentado bloquearla y mantener su estatus gracias a la limitación del 20% en el derecho a voto de los accionistas, aunque se tenga una participación mayor.
Uno de los objetivos de CaixaBank, principal accionista con más del 44% de las acciones, era alinear los derechos políticos con su inversión y tomar el control ejecutivo de la entidad. Hasta ahora estaba nivelado con la hija del presidente de Angola pese a duplicar la participación.
Pero Dos Santos ha logrado introducir en el orden del día de la próxima Junta de accionistas de BPI del próximo 29 de abril someter a votación la limitación estatuaria. Para la supresión es necesario el voto favorable del 75% del capital asistente a la junta y CaixaBank solo podrá votar por el 20% de sus acciones, con lo que necesita por casi obligación el apoyo de Dos Santos.
La OPA está condenada al fracaso ya que está condicionada por parte de CaixaBank a que la oferta tenga un nivel de aceptación del 50%, algo relativamente fácil teniendo en cuenta la participación de la antigua caja catalana, y a que se elimine de los estatutos de la entidad la limitación del 20% de los derechos de voto, difícil si Fainé no logra convencer a Dos Santos para que apoye a favor de la supresión.
Desde CaixaBank han explicado a DIRIGENTES, que la oferta ya está formulada y "no se va a elevar el precio". La estrategia de la entidad va a ser esperar a que desarrollen los acontecimientos. De momento, CaixaBank ha provocado que BPI se cayera de la puja por NovoBanco, la entidad rescatada en Portugal y que se ha puesto en venta, al no apoyar la operación el consejo. La adquisición de NovoBanco era uno de los objetivos prioritarios de Fernando Ullrich, presidente de BPI, que la consideraba estratégica para crecer en Portugal.