Los mercados están a la espera de una normalización de la política monetaria europea con la mirada puesta en la mejora de evolución de factores macroeconómicos de la zona euro y con la inflación subyacente creciendo de forma moderada. El objetivo del Banco Central Europeo (BCE) de una inflación en crecimiento sostenido y duradero para […]
Dirigentes Digital
| 05 jun 2017
Los mercados están a la espera de una normalización de la política monetaria europea con la mirada puesta en la mejora de evolución de factores macroeconómicos de la zona euro y con la inflación subyacente creciendo de forma moderada. El objetivo del Banco Central Europeo (BCE) de una inflación en crecimiento sostenido y duradero para toda la zona euro en niveles próximos al 2% a medio plazo parece que todavía está lejos de cumplirse. Según el dato adelantado por la oficina de estadística comunitaria, Eurostat, la tasa de inflación interanual de la eurozona cayó hasta el 1,4% en mayo, frente al 1,9% registrado en abril. Por su parte la inflación interanual subyacente de la zona euro, que excluye los precios de la energía y los alimentos frescos, se situó en el 1%, dos décimas más que en mayo del año pasado. En principio, para la reunión del BCE de este jueves, 8 de junio, los mercados analizarán el tono utilizado por su presidente, Mario Draghi, en busca de pistas sobre la retirada de estímulos. Para el gestor de fondos de Fidelity de renta fija europea, David Simer, “probablemente veamos cambios en las declaraciones que reflejen una visión más equilibrada de la economía por parte del Consejo de Gobierno de la entidad”. Según los expertos, el organismo monetario no adoptará medidas en esta reunión de junio debido a que se prevé un descenso de la inflación a medida que vayan disipando los efectos de base de los precios de las materias primas durante la segunda parte del año unido a que no se observan señales de subidas salariales. BCE adoptará medidas graduales Pero los analistas consultados coinciden en que Draghi irá adoptando medidas de forma gradual a partir de otoño. La compra de activos podría reducirse de 60.000 a 40.000 millones de euros al mes a partir del mes de septiembre hasta que el programa de compra de deuda se detenga por completo a finales del año 2018, según AXA IM. Según el consejero ejecutivo del BBVA, José Manuel González-Páramo, a finales de 2018, además, podría producirse la primera subida en años de los tipos de interés, una medida que hace tiempo que reclama la banca para impulsar su rentabilidad. En la última reunión del organismo monetario celebrado el pasado 29 de mayo, Mario Draghi defendió la necesidad de mantener los estímulos monetarios en un nivel “sustancial” pese a que han disminuido los riesgos para el crecimiento en la eurozona. Reserva Federal Por su parte, la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) que se reunirá entre el 13 y el 14 de junio tiene más a favor la adaptación de medidas. La economía estadounidense ha logrado la menor tasa de desempleo de los últimos 16 años, al situarse en el 4,3% en mayo, al crearse 138.000 nuevos puestos de trabajo. Los inversores descuentan que la presidenta de la Fed, Janet Yellen, subirá los tipos de interés por tercera vez aunque deberá confirmar antes si la debilidad de la inflación es temporal, según analistas de UniCredit.