La rápida penetración de las nuevas tecnologías de la información en los hogares, así como el mayor acceso a Internet a través desde cualquier dispositivo conectado, ha provocado importantes cambios en los comportamientos de los consumidores y en sus hábitos de consumo. Según el estudio “Nuevos hábitos de consumo, cambios sociales y tecnológicos”, publicado por […]
Dirigentes Digital
| 18 mar 2017
La rápida penetración de las nuevas tecnologías de la información en los hogares, así como el mayor acceso a Internet a través desde cualquier dispositivo conectado, ha provocado importantes cambios en los comportamientos de los consumidores y en sus hábitos de consumo. Según el estudio “Nuevos hábitos de consumo, cambios sociales y tecnológicos”, publicado por el Consejo Económico Social, en los últimos años, la extensión de las redes sociales digitales han provocado importantes cambios en el rol de los consumidores y usuarios, que han pasado de ser meros destinatarios finales de la información y los productos a convertirse en gestores de información. Este nuevo tipo de consumidor supone un importante reto para el desarrollo del e-commerce, así como para la actividad comercial tradicional. Según los datos analizados, aunque España tiene un buen índice de penetración de Internet, con una gran evolución en los últimos años, es bastante inferior al de Reino Unido, Dinamarca, Alemania o Francia, aunque está por delante de países como Italia o Portugal. El perfil del consumidor online resulta muy similar al del internauta medio, es decir, hay mayor presencia masculina, con edades comprendidas entre 25 y 49 años. La mayor parte de las compras que se realizan online desde nuestro país, son desde el hogar. Aunque en los últimos años ha avanzado considerablemente la compra a través de dispositivos móviles, lo cierto es que su uso entre los compradores españoles es muy baja. El estudio también refleja que tres de cada cinco compradores online utilizan las tarjetas de crédito o débito para realizar estas compras. El e-commerce en España está marcado por su carácter irregular, ya que sólo el 1,9% de las personas que compran a través de Internet, lo hacen de manera semanal. Uso de las TIC en España Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y de Eurostat, en 2015 el 79% de los individuos afirma haber utilizado Internet en los últimos tres meses. La utilización de la Red entre los más jóvenes (10-15 años) superó en 2015 el 90%. Además, casi el 80% de las viviendas ya dispone de conexión a Internet en nuestro país, más del 95% cuenta con teléfono móvil y, aproximadamente un 76% posee algún tipo de ordenador. La penetración del smartphones está provocando grandes cambios en el comportamiento de los individuos, especialmente en sus hábitos de consumo. El uso de Internet a través de un teléfono inteligente se ha incrementado de manera notable en los últimos años, situando a nuestro país por encima de la media de la Unión Europea. Concretamente, según datos de Eurostat, el 60,8% de los internautas españoles utiliza un smartphone para acceder a Internet, el 51,7% lo hace desde un portátil y el 34,1% desde la tablet. Si bien, aunque el proceso de penetración de las TIC en la población española ha sido constante y positivo en los últimos años, se detectan importantes diferencias de uso en la actualidad. La edad es una de las variantes que explican la diferencia de uso de Internet en España, estando practicamente generalizado entre los grupos de edad de entre 16 y 44 años y descendiendo considerablemente entre los grupos de mayor edad. También persiste la brecha digital por sexos, siendo inferior la utilización de la Red entre las mujeres (77,3%) que entre los hombres (80,3%). Además, el acceso a Internet está menos generalizado en los municipios de menos de 10.000 habitantes (71%).