Imagínese entrando en un edificio. Llega por cualquier razón: una reunión, una entrevista o, simplemente, quiere ver a alguien. La primera sorpresa se produce tras cruzar el umbral. Espera encontrarse ante un mostrador en el que le atienda un o una recepcionista en traje o atuendo corporativo. Sin embargo, en lugar de eso, da de […]
Dirigentes Digital
| 23 may 2018
Imagínese entrando en un edificio. Llega por cualquier razón: una reunión, una entrevista o, simplemente, quiere ver a alguien. La primera sorpresa se produce tras cruzar el umbral. Espera encontrarse ante un mostrador en el que le atienda un o una recepcionista en traje o atuendo corporativo. Sin embargo, en lugar de eso, da de bruces con un soporte que le llega hasta la cintura en el que hay una pantalla. En ella aparece una cara humana, con una amplia sonrisa, que le da la bienvenida y le pregunta: “¿En qué puedo atenderle?”. No es un sueño, ni una imaginación, ni siquiera es una predicción de lo que podría pasar en el futuro. La persona que aparece en la pantalla es una asistente virtual y se llama Alice. Es el nombre que le ha puesto Konica Minolta a esta recepcionista virtual, que consigue atender de una forma eficaz y completa a las visitas. Se trata de una de las innovaciones que presentó Konica Minolta el pasado viernes 18 de mayo en su Experience Hub de Ámsterdam, que contó con la presencia de DIRIGENTES. El principal atributo de Alice es la gestión eficiente y la conexión entre información, esto es, consigue que los visitantes puedan conectar con sus anfitriones, además de realizarles distintas indicaciones en función de sus necesidades. Llama la atención la diversidad de soluciones que puede ofrecer una herramienta así aunque, no obstante, no se puede decir que sea un concepto totalmente nuevo, sino que ya existen aplicaciones similares. Konica Minolta también presentó su Sistema de Reserva Inteligente de Salas, en una línea de aplicaciones similar a su asistente virtual. Este nuevo sistema tiene la capacidad de predecir la presencia de personas en las salas de reuniones en base a los patrones de uso. Además, proporciona opciones para modificar parámetros como la temperatura o la calidad del aire. Se trata de instrumentos nacidos para transformar la manera de trabajar. El hecho de contar con un asistente para reservar una sala y que, a través de la tecnología, se anticipe a las circunstancias y a las preferencias, es una pequeña comodidad, pero es una muestra más de la influencia que pueden tener en los procesos en las empresas. Y lo mismo sucede con el asistente virtual. Es una forma de tener toda la información al alcance de la mano, con la capacidad de responder a todas las preguntas. Sin embargo, tanto los responsables de la presentación como los periodistas muestran una preocupación que no tiene fácil respuesta. ¿Cuánto tiempo pasará hasta que nos acostumbremos a convivir con estas herramientas? De momento, hay algunos conceptos que ya son reales en las oficinas de Konica Minolta en Amsterdam. Por ejemplo, el hecho de que exista una cancha de baloncesto en el propio edificio. O encontrar un pequeño bar dentro del espacio de trabajo. Son detalles que, si bien no tienen que ver con una revolución tecnológica, ya dicen mucho de los nuevos métodos de trabajo que están por llegar.