El supervisor sigue preocupado por la baja rentabilidad del sector bancario y recomienda a los bancos que mantengan el esfuerzo de reducción de costes. El organismo que dirige José María Linde advierte de que los bajos tipos de interés se prolongarán en el tiempo perjudicando seriamente la capacidad de generar beneficios. “El entorno actual de […]
Dirigentes Digital
| 03 nov 2016
El supervisor sigue preocupado por la baja rentabilidad del sector bancario y recomienda a los bancos que mantengan el esfuerzo de reducción de costes. El organismo que dirige José María Linde advierte de que los bajos tipos de interés se prolongarán en el tiempo perjudicando seriamente la capacidad de generar beneficios. “El entorno actual de tipos de interés muy reducidos, junto con el volumen de actividad bancaria nueva aún muy limitado y la existencia de un nivel todavía elevado de activos no productivos, presionan a la baja la capacidad de generación de resultados de las entidades de depósito españolas”, indica el informe. El supervisor pone énfasis en la dificultad que está teniendo el negocio principal de los bancos por las condiciones del mercado. “En línea con la caída de los tipos de interés, descienden tanto la rentabilidad del activo como el coste del pasivo, si bien el margen de caída de este último tiende a estrecharse a medida que los tipos de interés de los depósitos minoristas, que constituyen el grueso de los pasivos, se acerca a cero”, explica. Es decir, cada vez hay menos margen en las rentabilidades que obtiene el sector por prestar dinero en relación al interés que ofrecen por la captación de pasivo. Y avisa que el margen de intereses por unidad de activo se sitúa cerca de sus niveles mínimos históricos. El Banco de España informa que la media del sector tiene unos niveles de rentabilidad de sus fondos propios en torno al 6%, a cierre de junio, ligeramente por encima del 5% del que se considera actualmente se encuentra el coste de capital. Las entidades que se encuentren por debajo destruyen capital propio y generan pérdidas. “Las menores pérdidas por deterioro de activos han permitido compensar, hasta cierto punto, la reducción de márgenes”, subraya el supervisor. Pero no oculta que el margen de intereses ha caído un 9,4 % respecto al obtenido en el primer semestre del año pasado. Por otra parte, el supervisor aplaude que la mejora de la actividad económica en España ha permitido continuar disminuyendo el volumen de activos dudosos y refinanciados en las entidades de depósito. En particular, los activos dudosos se han reducido un 38 % desde diciembre de 2013. Además, “la solvencia de las entidades españolas sigue superando con holgura los mínimos regulatorios”. Así la ratio de capital ordinario de nivel 1, CET1, a junio de 2016 alcanzó el 12,4 %. “una evaluación prospectiva de la capacidad de resistencia del sistema bancario español que se describe en este Informe, muestra que, a nivel agregado, ante un escenario macroeconómico adverso, el sistema bancario español experimentaría, al final del horizonte temporal fijado, una reducción significativa en sus niveles de capital, pero aun así, lograría mantener un nivel de solvencia por encima del mínimo regulatorio exigible”, señala.