Los expertos del IEB confían en la recuperación económica española, mejorando sus previsiones para este año hasta situar el crecimiento del PIB en un 2,7%, bajo la estimación de que el precio del petróleo se sitúe de media en 60 dólares por barril. Miguel Ángel Bernal, coordinador del departamento de investigación del IEB, explica que […]
Dirigentes Digital
| 15 ene 2015
Los expertos del IEB confían en la recuperación económica española, mejorando sus previsiones para este año hasta situar el crecimiento del PIB en un 2,7%, bajo la estimación de que el precio del petróleo se sitúe de media en 60 dólares por barril.
Miguel Ángel Bernal, coordinador del departamento de investigación del IEB, explica que el crecimiento de la economía española "podría incluso rondar el 3% si no fuera por las tensiones geopolíticas que pueden lastrar el crecimiento de la economía en todo el mundo". Para Bernal, estas previsiones optimistas están basadas "en la fortaleza de la demanda interna y en una ligera recuperación de la demanda pública, mientras que continuará la recuperación en la inversión".
El papel que los bancos centrales jugarán durante los próximos meses también tiene mucho que ver en esta optimista visión. Los expertos consideran que el Banco Central EUropeo (BCE) mantendrá en 2015 el nivel de los tipos de interés en el 0,05% y que el organismo comunitario podría poner en marcha dos programas de expansión cuantitativa (QE). "El primero, que Mario Draghi anunciará con toda probabilidad en la reunión del día 22, arrancará en marzo o abril y el otro podría desarrollarse en el último trimestre del año, si se confirma el estancamiento de algunas economías importantes como Alemania, Italia y Francia", aseguran.
Sobre el mercado de divisas, el IEB pronostica que la caída del euro podría continuar en el primer semestre del año y apuesta por que la moneda comunitaria tenderá a la paridad con el dólar. Para Bernal "la caída del euro podría beneficiar las exportaciones de las empresas españolas fuera de la zona euro".
En este escenario, la capacidad de financiación de la economía continuará siendo positiva y debería tender al alza gracias a factores como la estabilidad macroeconómica, la mejora en las previsiones de las casas de rating, las mayores facilidades para la financiación de las grandes empresas o la entrada de capital inversor en todos los sectores. "El IEB apuesta por una caída de la prima de riesgo española, hasta situarse en los 40 puntos básicos. Precisamente, los riesgos en la inversión de renta fija no vendrán de la mano de problemas económicos, sino por el nivel actual de los tipos de interés", aseguran.
Sin embargo, esta caída de la prima de riesgo no servirá como en otras ocasiones para impulsar la renta variable nacional. Desde el instituto consideran que el Ibex pasará un año ‘ramplón’ despidiéndolo en el entorno de los 10.000 puntos, por lo que los beneficios en renta variable sólo llegarán vía rentabilidad por dividendos.
Entre los principales frentes abiertos, los expertos destacan las dudas que provocarán en los inversores la aparición de nuevas alternativas políticas en Europa,así como las nuevas recapitalizaciones que tendrán que llevar a cabo algunos bancos europeos. "Los problemas en los mercados emergentes, derivados de la caída en petróleo y materias primas, el conflicto abierto en Rusia, la nueva situación de China, que llevará a cabo un proceso de tránsito hacia la potenciación de la demanda interna, y la incertidumbre que provocará el proceso de normalización de la política monetaria de la Fed" también pueden ser foco de incertidumbre.