Orange gastó el 14,3% de sus ingresos del año pasado en la mejora de sus redes con las tecnologías más rápidas como el 4G en el móvil y la fibra de banda ancha, un porcentaje más alto que un año antes, cuando destinó el 13,7% a este objetivo. "La banda ancha de alta velocidad tanto […]
Dirigentes Digital
| 17 feb 2015
Orange gastó el 14,3% de sus ingresos del año pasado en la mejora de sus redes con las tecnologías más rápidas como el 4G en el móvil y la fibra de banda ancha, un porcentaje más alto que un año antes, cuando destinó el 13,7% a este objetivo. "La banda ancha de alta velocidad tanto en móviles y fijos es un motor de crecimiento y una manera de volver a ganar clientes", dijo el presidente financiero Ramón Fernández, que agregó: "En algún momento entre 2015 y 2016 veremos nuestros ingresos comenzar a estabilizarse, pero esto también dependerá de cómo se comportan nuestros competidores."
Los ingresos anuales bajaron a 29.450 millones de euros, mientras que el Ebitda se situó en 12.110 millones. En España, el grupo está a la espera del visto bueno comunitario para la compra del operador Jazztel con la intención de mejorar su posición en un mercado en el que redujo un 7,8% su Ebitda a 958 millones. Los ingresos totales en España bajaron un 4,4% a 3.876 millones pese al alza de clientes, que alcanzaron 14,57 millones frente a los 12,6 millones de hace un año, en un contexto de mayor compentencia en precios.
Al igual que otras grandes empresas europeas de telecomunicaciones, las acciones de Orange han subido 15,5% este año ya que los inversores apuestan por este sector por su carácter defensivo y los elevados dividendos.
La ola de consolidación en el Reino Unido, España y Alemania también ha impulsado las esperanzas de los inversores de que los operadores restantes serán capaces de poner fin a años de la caída de precios y comenzar a crecer de nuevo.