A veinte días para la votación, la campaña se recrudece con mensajes cada vez más alarmistas. El Gobierno de Cameron está apoyándose en las consecuencias económicas negativas del Brexit. El ministro de Hacienda, George Osborne, ha indicado que a corto plazo se destruirán 400.000 puestos de trabajo en el sector servicios. Las previsiones de Osborne […]
Dirigentes Digital
| 03 jun 2016
A veinte días para la votación, la campaña se recrudece con mensajes cada vez más alarmistas. El Gobierno de Cameron está apoyándose en las consecuencias económicas negativas del Brexit. El ministro de Hacienda, George Osborne, ha indicado que a corto plazo se destruirán 400.000 puestos de trabajo en el sector servicios.
Las previsiones de Osborne vienen precedidas de las advertencias de la City londinense. Dirigentes importantes del sector financiero, uno de los pilares estratégicos de la economía británica, ya han avisado que sacarán sus divisiones bancarias a otras zonas de Europa. El consejero delegado de JP Morgan, Jaime Dimon, ha dicho que en caso de producirse una salida al banco no le quedará más remedio que reorganizar la entidad y significará "menos empleo para Reino Unido y más trabajo en Europa". El banquero ha indicado que supondrá un duro golpe para el sector servicios.
Otros competidores como Citigroup, Bank of America o Morgan Stanley ya han anunciado que consideran establecer su base de operaciones en Irlanda y Goldman Sachs ha apuntado a Holanda. HSBC ha sugerido que trasladaría sus oficinas a París. Actualmente, JP Morgan cuenta con 16.000 empleos en Reino Unido.
Por primera vez en las encuestas la salida de Reino Unido de la UE toma la delantera, según el sondeo publicado por el diario británico The Guardian. Esta consulta concede cuatro puntos de ventaja a los que se muestran favorables al Brexit.