Después de superar los 6.000 dólares por tonelada, los precios del cobre continuaron repuntando el mes pasado y casi alcanzaron el próximo umbral a los 7.000 dólares por tonelada. Todo ello, empujado por un entorno de crecimiento económico en los países desarrollados, pero sobre todo en las economías emergentes, que son más dependientes de los […]
Dirigentes Digital
| 11 sep 2017
Después de superar los 6.000 dólares por tonelada, los precios del cobre continuaron repuntando el mes pasado y casi alcanzaron el próximo umbral a los 7.000 dólares por tonelada. Todo ello, empujado por un entorno de crecimiento económico en los países desarrollados, pero sobre todo en las economías emergentes, que son más dependientes de los productos básicos. En este sentido, el equipo de expertos de materias primas de Julius Baer explica cuál es su visión sobre la situación del cobre. Mientras que el telón de fondo del crecimiento global es sólido, no consideran que “la mejora de la demanda fuera el principal motor de este rally”. De hecho, argumentan “la demanda tiende a suavizarse estacionalmente durante los meses de verano y esta vez, no parecía ser diferente a momentos anteriores en los que se establecía un recargo pagado por encima del precio cotizado para obtener la entrega con tendencia hacia los lados”. Al mismo tiempo, añaden, “la oferta continuó recuperándose de las interrupciones de las mineras a principios de año”. Gracias a un incremento más rápido de lo esperado en Escondida, la mina más grande del mundo, la producción chilena está de nuevo en el camino de crecimiento, mientras que el conflicto duradero alrededor de Grasberg, la segunda mina más grande del mundo en Indonesia, ha sido finalmente resuelto. De este modo, la producción de minas debería “seguir mejorando en los próximos meses, reduciendo el riesgo de subaprovisionamiento”. En su opinión, “esto deja abierta la mejora del sentimiento del mercado de futuros como el principal impulsor del reciente repunte”. Este es un denominador común para los metales industriales en general ya que los precios “se han estado moviendo en gran medida en sincronía en los últimos dos meses, lo que sugiere una mayor tendencia seguida por los traders especulativos como los hedge funds”. En el mercado de futuros de cobre, las posiciones mantenidas por estos traders han alcanzado niveles excesivos en los últimos tiempos, apoyando la opinión del equipo de expertos de Julius Baes de que los precios “se alejaban de niveles fundamentalmente justificados”. Mejorar el sentimiento en lugar de mejorar los fundamentales ha sido el principal motor de la reciente subida de los precios del cobre. Si bien la demanda es sólida, “sólo vemos un riesgo limitado de subaprovisionamiento con la recuperación de la producción minera de las interrupciones en los primeros años”.