La devaluación del yuan sigue marcando el comercio exterior del gigante asiático. En el mes de abril, la diferencia entre las exportaciones denominadas en yuanes y en dólares fue de casi seis puntos por la devaluación de la moneda china, registrando una caída del 1,8% al denominarlas en dólares. En el mes de mayo, según […]
Dirigentes Digital
| 08 jun 2016
La devaluación del yuan sigue marcando el comercio exterior del gigante asiático. En el mes de abril, la diferencia entre las exportaciones denominadas en yuanes y en dólares fue de casi seis puntos por la devaluación de la moneda china, registrando una caída del 1,8% al denominarlas en dólares. En el mes de mayo, según los últimos datos publicados por la Administración General de Aduanas, las exportaciones en dólares han vuelto a registrar un retroceso del 4,1% interanual. Al denominarlas en yuanes, registran una leve subida del 1,2%.
Según informa Reuters, la debilidad de la demanda mundial ha sido la justificación de China para el retroceso del comercio exterior en el mes de mayo. Las importaciones, en cambio, registraron su menor caída desde finales de 2014 con un -0,4%; en yuanes, las compras al extranjero crecieron en China un 5,1%, en parte influidas por una subida de los precios de las materias primas.
Para los expertos, los datos de las importaciones sugieren que la demanda interna se estaría recuperando tras el gasto del país en importantes proyectos de infraestructuras destinados a apoyar el crecimiento.
El dato de venta de automóviles también apoya la estabilidad de la demanda interna china. Las compras de coches crecieron un 11% hasta las 1,76 millones de unidades vendidas en mayo.
En mayo, el superávit comercial ascendió a 49.980 millones de dólares, por debajo de la previsión de 58.000 millones de dólares, aunque mejor que el dato de abril, cuando se registraron 45.600 millones de dólares.
Los economistas consultados por Reuters auguraban una caída más profunda de la exportaciones con respecto a abril, del 3,6%, pero el dato real ha sido significativamente más bajo. En cambio, también se esperaba una caída mayor para las importaciones, del 6%.
Ahora, los expertos se muestran preocupados por la rebaja de previsiones de crecimiento de la economía mundial, que podría ser un nuevo factor de riesgo para la recuperación del comercio exterior chino. Según informa Bloomberg, Ma Jun, economista jefe de la oficina de investigación del Banco Popular de China, señala que una caída de 10 puntos porcentuales de las exportaciones podría suponer una caída del 1% en el PIB.