Los datos del último Barómetro Active/Pasive que Morningstar elabora semestralmente sobre el mercado estadounidense lo dejan claro. Los fondos activos se comportan peor que los pasivos a corto y largo plazo. Los más baratos suelen ser, además, los más rentables. Comparado con el Barómetro del primer semestre de 2015, los fondos activos han visto empeorar […]
Dirigentes Digital
| 02 sep 2016
Los datos del último Barómetro Active/Pasive que Morningstar elabora semestralmente sobre el mercado estadounidense lo dejan claro. Los fondos activos se comportan peor que los pasivos a corto y largo plazo. Los más baratos suelen ser, además, los más rentables.
Comparado con el Barómetro del primer semestre de 2015, los fondos activos han visto empeorar su ratio de éxito, que mide el porcentaje de fondos que sobreviven y obtienen una rentabilidad por encima de la media de los fondos de gestión pasiva. De hecho, de las 12 categorías americanas analizadas tan sólo 2 (US Small Blend y Diversified Emerging Markets) han visto aumentar su ratio de éxito en los últimos 12 meses.
El Barómetro de Morningstar muestra que los fondos de gestión activa se han comportado generalmente peor que los pasivos, especialmente en periodos de largo plazo. A 10 años, no hay ninguna categoría en la que la tasa de éxito supere el 50%, lo que indica que en la última década ha sido más rentable invertir en fondos pasivos que en activos.
"Además, el Barómetro de junio 2016 también muestra que esa tasa de éxito depende en gran medida de los costes. El inversor en fondos activos hubiera obtenido una mayor rentabilidad simplemente eligiendo los productos más baratos", indican los expertos.
Y no solo se trata de una percepción del mercado estadounidense. La reducción se comisiones se impone en un sector en el que la gestión pasiva sigue ganando terreno ante la evidencia que los productos más caros, tradicionalmente ligados a estrategias activas, no rinden como los anteriores.
Hacia una reducción de costes
Morningstar también ha llevado a cabo un estudio a nivel europeo sobre la evolución de los costes de los fondos, que demuestra cómo el coste total medio ponderado por patrimonio de los productos ha disminuido desde el 1,09% (del último análisis realizado en el año 2013) hasta el 1% (con datos de mayo de 2016).
No se trata solo de una mayor demanda por fondos más baratos, sino además por la mayor penetración de las clases limpias (sin comisión de distribución), que son 46 puntos básicos más baratas que aquellas que incluyen comisión de distribución.
A pesar de todo, y aunque las comisiones se han reducido en porcentaje, los inversores europeos pagan hoy en día más gastos en términos nominales que en 2013. "Estimamos que el pago anual de comisiones alcanza los 61.000 millones de euros frente a los 53.000 millones en 2013", indican los expertos.
Además, en países como Dinamarca, Alemania, Italia y España, los gastos corrientes tendieron a aumentar entre 2013 y 2016. En el caso de España, el aumento se debe a un cambio de preferencia por parte de los inversores entre 2013 y 2016. "En ese periodo, el peso de los fondos de renta fija y fondos garantizados se ha reducido en favor de los fondos mixtos (cuya cuota de mercado ha pasado del 24% al 47%)", indican los expertos de la firma, recordando que también hay que recordar que los costes totales ponderados por patrimonio se han incrementado en 23 puntos básicos dentro de este último tipo de fondos, pasando de 1,14% hasta el 1,37%.
El estudio confirma también el aumento en la cuota de mercado de los fondos pasivos, cuya participación en los activos gestionados ha aumentado del 8% en 2013 hasta el 10,3% este año. En promedio, los gastos corrientes de los fondos pasivos se sitúan en el 0,31% en Europa, frente a 1,38% para los fondos activos.