La economía alemana creció un 0,4% en el trimestre de abril a junio tras una expansión del 0,3% en los primeros tres meses de 2015. El pronóstico promedio para el segundo trimestre, según un sondeo de Reuters, era de un crecimiento del 0,5%. Los datos no ajustados mostraron que la economía se expandió un 1,6% […]
Dirigentes Digital
| 14 ago 2015
La economía alemana creció un 0,4% en el trimestre de abril a junio tras una expansión del 0,3% en los primeros tres meses de 2015. El pronóstico promedio para el segundo trimestre, según un sondeo de Reuters, era de un crecimiento del 0,5%.
Los datos no ajustados mostraron que la economía se expandió un 1,6% interanual en el segundo trimestre, superando el pronóstico promedio de Reuters de un crecimiento del 1,5 por ciento. "Apoyadas por un euro débil, las exportaciones crecieron con mucha más fuerza que las importaciones, según los cálculos preliminares", dijo la Oficina de Estadísticas.
Las compañías alemanas están creciendo en confianza. La confianza empresarial mejoró en julio tras dos meses de caídas, ya que el acuerdo entre Grecia y sus acreedores para negociar un tercer rescate elevó el ánimo de las firmas. Aproximadamente la mitad de las 30 principales compañías alemanas registraron resultados financieros por encima de lo esperado para el período abril-junio. Más de dos tercios de ellas, no obstante, siguieron con sus previsiones generales ya que persisten las incertidumbres geopolíticas y económicas en la segunda mitad del año.
Según informa Reuters, en una noticia positiva para las previsiones económicas, las cifras publicadas la semana pasada mostraron que los pedidos industriales registraron sus mayores subidas desde principios de 2011 en el período abril-junio gracias principalmente a la fuerte demanda externa.
"Aunque la economía de la eurozona parece mostrar algunos signos de reequilibrio, con estancamiento en Francia y fuertes datos de crecimiento en España y Grecia, Alemania sigue como el faro aburrido de la fiabilidad", dijo el economista e ING Carsten Brzeski. Sin embargo, la fuerte exposición exterior de Alemania podía pasar de fortaleza a riesgo dados los temores sobre las perspectivas mundiales.