El mapa genético es tan importante como el geográfico a la hora de tener más posibilidades de superar un cáncer. Eso es lo que se deduce del último estudio realizado por la revista médica The Lancet, en el que se han analizado los datos de 25 millones de pacientes en 67 países. El trabajo, denominado […]
Dirigentes Digital
| 26 nov 2014
El mapa genético es tan importante como el geográfico a la hora de tener más posibilidades de superar un cáncer. Eso es lo que se deduce del último estudio realizado por la revista médica The Lancet, en el que se han analizado los datos de 25 millones de pacientes en 67 países.
El trabajo, denominado Concord 2, estima que "la desigualdad en el acceso a los servicios de diagnóstico y tratamiento óptimo" supone una de las principales variantes a la hora de superar la enfermedad. En el estudio, se han analizado los diez tipo de cáncer más comunes y que suponen el 63% de todos los enfermos por esta patología: cáncer de colon, de estómago, hígado, recto, pulmón, mama, cuello de útero, ovarios, próstata y leucemia.
Los datos en España
En este sentido, España tiene un mayor índice de supervivencia en el cáncer de mama y en el próstata, con unas tasas de supervivencia del 83 y del 87%, respectivamente. En el caso del cáncer de cuello de útero, la tasa es del 65,2%; mientras que el de leucemia es del 52%. Algo más bajas son las probabilidades de superar la enfermedad en el caso del cáncer de ovarios, con un ratio del 38,4%.
En cambio, si un paciente con cáncer de estómago nace en Japón, tendrá más probabilidades que si vive en España. Y es que en el país asiático las probabilidades de supervivencia son del 54% frente al 25% de España. Si nos fijamos en otros países con menos desarrollo económico, la tasa se reduce considerablemente: en Gambia, la supervivencia al cáncer de hígado es sólo de un 5%.
Claudia Allemani, autora principal del trabajo y profesora de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres señala que "nuestros hallazgos muestran que, en algunos países, el cáncer es mucho más letal que en otros. En el siglo XXI no debería existir un abismo tan dramático en la supervivencia". Pero, indudablemente, la brecha existe.
Además, el estudio ha examinado datos entre 1995 y 2009, por lo que no recoge los recortes en sanidad que han realizado algunos gobiernos durante la crisis.