Tras un ‘duro’ inicio de agosto, la renta variable del Viejo Continente trata de reestructurarse al alza y celebra la primera rebaja del precio del dinero en Reino Unido desde marzo de 2009, quedando los tipos en el 0,25% (frente al 0,50% actual). Aumentan también las compras de activos (QE), hasta los 435.000 millones de libras, […]
Dirigentes Digital
| 04 ago 2016
Tras un ‘duro’ inicio de agosto, la renta variable del Viejo Continente trata de reestructurarse al alza y celebra la primera rebaja del precio del dinero en Reino Unido desde marzo de 2009, quedando los tipos en el 0,25% (frente al 0,50% actual). Aumentan también las compras de activos (QE), hasta los 435.000 millones de libras, para hacer frente a la desaceleración de la economía británica que ya comienzan a mostrar los primeros indicadores (los PMIs se encuentran todos por debajo de 50, esto es, en contracción).
Ahora bien, no son pocos los expertos que también tienen sus dudas respecto a la eficacia de estos estímulos para hacer frente al impacto de la decisión de los británicos de salir de la Unión Europea (UE).
Tal y como explica Link Securities, nos encontramos en un momento en el que "los mercados financieros no presentan las disfunciones que se dieron en la crisis financiera y en un entorno con los tipos de interés ya muy bajos. El problema al que se enfrenta Reino Unido es de incertidumbre sobre cuál va a ser su relación con la UE, por lo que posiblemente estas medidas no va a impulsar la inversión".
Un escepticismo sobre la efectividad de las actuaciones de los bancos centrales, añaden, al que "se unirá a la decepción de los inversores por la actuación reciente del Banco de Japón (BoJ por sus siglas en inglés)", poniendo "en entredicho la capacidad de estas entidades para relanzar el crecimiento económico".
Coincide CMC Markets al señalar que la experiencia nipona y del Banco Central Europeo (BCE) "debería ser una lección para el BoE (…) los tipos negativos han sido un desastre que ha sacado a la luz la parte más vulnerable de los bancos europeos", mientras los últimos anuncios de ambas autoridades monetarias "no han logrado generar la respuesta deseada de ls mercados, alertando de que la política monetaria está llegando a su límite".
Mientras, el Departamento de Análisis de Bankinter añade: "Lo más relevante de todo esto es si el debate sobre el agotamiento de los bancos centrales vuelve a escena". Así, creen que las Bolsas podrían rebotar este jueves, pero será un movimiento "puntual", con el crudo a la baja y "y la dañada banca italiana arrastrando al sector, aumentará el sentimiento bajista y penalizará a la renta variable. En este escenario el euro se debilitará (1,00/1,10 es nuestro rango estimado) y los bonos, a pesar de estar en máximos, seguirán corriendo".
En este contexto, el Tesoro de España ha colocado 3.040 millones de euros en deuda a medio y largo plazo, frente al objetivo de entre 2.250 y 3.750 millones que se había marcado inicialmente. Y lo ha hecho con nuevas caídas en las rentabilidades de las obligaciones emitidas, con las de cinco años al filo ya del 0%.