Los inversores mantienen muy presente el riesgo político al otro lado del Atlántico, con la crisis en EEUU por los contactos entre Donad Trump y Rusia y el nuevo caso de corrupción en Brasil que ha salpicado de lleno al presidente Michel Temer. Hoy, además, la prima de riesgo nacional actualmente rondando los 123 puntos […]
Dirigentes Digital
| 22 may 2017
Los inversores mantienen muy presente el riesgo político al otro lado del Atlántico, con la crisis en EEUU por los contactos entre Donad Trump y Rusia y el nuevo caso de corrupción en Brasil que ha salpicado de lleno al presidente Michel Temer. Hoy, además, la prima de riesgo nacional actualmente rondando los 123 puntos básicos, cotizará la victoria de Pedro Sánchez para liderar el partido socialista. De momento, la presión política hace que el Ibex se sitúe a la cola de las Bolsas europeas. El objetivo hoy será no perder los 10.700 puntos. Los analistas de Link Securities aseguran en su informe diario que la reelección de Sánchez como Secretario General puede convertirse a medio plazo en un lastre para los mercados de renta fija y variable españoles “si los inversores interpretan que el nuevo modo de ejercer la oposición por parte del partido socialista puede amenazar la estabilidad política del país, más aún teniendo en cuenta la amenaza secesionista catalana”. “El rebote del viernes, más inmediato de lo que esperábamos, pone de manifiesto el sólido respaldo con que cuentan las bolsas, en base a 2 factores casi estructurales: la presión de la liquidez (generada tanto por los bancos centrales, como por el propio ciclo expansivo) y el grave déficit de alternativas de inversión rentables”, indican desde el departamento de análisis de Bankinter. A su juicio, ese es el gran dilema de este ciclo en las Bolsas, incluido el Ibex: ¿Cómo encontrar rentabilidades decentes sin asumir riesgos indecentes? “Esto no sólo no ha cambiado, sino que se ha agravado. Con la bolsa americana en máximos históricos y con unas valoraciones de compañías que ya no son claramente superiores a sus cotizaciones, lo natural es que cualquier contratiempo (Trump, Brasil, etc) provoque una toma de beneficios preventiva… como la semana pasada. Pero, salvo variables nuevas, las tomas de beneficios no pueden durar mucho”, aseguran. En el apartado empresarial, dentro del Ibex 35 todas las miradas están puestas de nuevo sobre Banco Popular. La volatilidad se ha adueñado de la cotización de la entidad entre rumores de ofertas para su posible compra. Una operación que, en todo caso, debería resolverse antes del 10 de junio. Los inversores también siguen con especial atención la evolución del precio del petróleo, con el barril de Brent superando hoy los 54 dólares ante la amenaza de nuevos recortes de producción a pocos días de la nueva reunión de la OPEP del próximo jueves. Subidas que son consecuencia además de la debilidad del dólar, con el par euro/dólar todavía en máximos superando las 1,12 unidades. Semana también con escasas referencias macroeconómicas en Europa, donde destacará el martes la encuesta IFO en Alemania. Se espera una ligera caída en la situación actual (120,9 est. vs 121,1 ant.), mientras que las expectativas podrían mostrarse más optimistas (105,7 est. vs 105,2 ant.). El jueves conoceremos el PIB en España, que apunta a una subida trimestral del 0,8% e interanual del 3%. También Reino Unido anunciará su PIB, que podría situar su variación entre trimestres en el 0,3% y en el 2,1% con respecto al mismo periodo del año anterior. Poco después se conocerán las últimas actas de la Fed, en las que los inversores podría encontrar alguna pista con respecto a una próxima subida de tipos. Ya el viernes, se publicará el PIB de EEUU para el primer trimestre del 2017. Las estimaciones previas apuntan a una aceleración desde el 0,7% hasta el 0,9%. En cualquier caso, y aprovechando el fondo alcista que continúa predominando en el mercado, los expertos de XTB plantean un escenario alcista para el conjunto de esta semana, con un rango entre los 10.700 a 11.000 puntos en el Ibex. La corrección en los parqués nacionales desde los máximos de los últimos dos años, debiera ser aprovechado para la acumulación en aquellos valores que mejor comportamiento han mantenido a lo largo del ejercicio.