El Tribunal Superior de Reino Unido ha dictaminado que el Parlamento del país deberá dar permiso al Gobierno para activar el artículo 50 e iniciar la desconexión con la Unión Europea. El referéndum de ruptura con la Unión Europea en Reino Unido ya no es suficiente para activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, […]
Dirigentes Digital
| 03 nov 2016
El Tribunal Superior de Reino Unido ha dictaminado que el Parlamento del país deberá dar permiso al Gobierno para activar el artículo 50 e iniciar la desconexión con la Unión Europea. El referéndum de ruptura con la Unión Europea en Reino Unido ya no es suficiente para activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, el inicio formal de las negociaciones para salir del bloque comunitario. El Tribunal Superior de Justicia británico ha decidido que Theresa May no puede iniciar el Brexit sin el voto afirmativo de los diputados del Parlamento. Hace unas dos semanas, varios ciudadanos británicos elevaron a la justicia su petición de que el Gobierno pidiese la autorización del Parlamento para seguir adelante con el Brexit. Entre los demandantes se encuentra, por ejemplo, una ejecutiva de la City londinense, que alega que el Gobierno no está legitimado para tomar esta decisión basándose únicamente en un referéndum consultivo, que no vinculante. El Gobierno se escuda en que el referéndum, que dio la victoria al Brexit con el 51,9% de los votos, es suficiente para iniciar el proceso. El artículo 50 del Tratado de Lisboa establece la salida de cualquier país miembro de la UE “de acuerdo con sus propios requisitos constitucionales”, lo que deja abierta a la interpretación la forma de decidir dicha salida. May considera que la prerrogativa real permite al Gobierno decidir tras la convocatoria del referéndum y comunicar la decisión a Bruselas. Sin embargo, el magistrado que ha leído el fallo del tribunal ha señalado que la soberanía parlamentaria es “la norma más fundamental de la legislación constitucional británica”, por lo que deberá tener la última palabra. En caso de que el Gobierno esté disconforme con el resultado, y dada la importancia de la sentencia para el futuro de Reino Unido, las apelaciones las trataría directamente la Corte Suprema, el máximo organismo judicial británico, en el mes de diciembre. Y es que Theresa May quiere iniciar los trámites para salir de la Unión Europea “antes de que acabe marzo” de 2017 según unas declaraciones que hizo a la cadena BBC hace un mes. Desde que se active el artículo 50, Reino Unido tendrá dos años para negociar, aunque el plazo podría ampliarse. Si este calendario se cumple, la salida completa de Reino Unido tendría lugar para la primavera de 2019, antes de las próximas elecciones generales británicas.