En 2016, el sector retail físico en los 28 países de la Unión Europea registró un descenso nominal del 0,4% en sus ventas. Sin embargo, en esta cifra ha influido mucho el tipo de cambio de Reino Unido, inmerso en una profunda devaluación de la libra; si se excluye el caso británico, las ventas del […]
Dirigentes Digital
| 10 jul 2017
En 2016, el sector retail físico en los 28 países de la Unión Europea registró un descenso nominal del 0,4% en sus ventas. Sin embargo, en esta cifra ha influido mucho el tipo de cambio de Reino Unido, inmerso en una profunda devaluación de la libra; si se excluye el caso británico, las ventas del retail europeo habrían crecido un 1,7% en euros. Rumanía se situó en cabeza por crecimiento en las ventas con una subida del 10,5%. En general, el crecimiento fue más bajo en el oeste y el sur de Europa. En España y Portugal, por ejemplo, el crecimiento ha sido del 2,5% y del 3,6%, respectivamente. Solo Bélgica (-1,1%), Dinamarca (-0,9%) y Grecia (-0,2%) sufrieron un descenso en sus ventas durante 2016. El caso de Reino Unido es particular, pues el resultado varía enormemente en función de si las ventas se contabilizan en libras (+2,3%) o en euros (-9,4%) debido a la devaluación de la moneda. Qué empuja al retail En el informe de GFK señalan tres importantes factores que influyen en el desarrollo del retail físico: la evolución de los precios, el poder adquisitivo y el porcentaje que los ciudadanos dedican de su consumo al retail. En primer lugar, las tendencias en los precios influyen tanto en las decisiones estratégicas de los distribuidores e inversores como en el comportamiento de compra de los consumidores. En 2016, la inflación en la UE fue de un 0,3%. Para este año, la Comisión Europea espera una inflación del 1,8%. Excluyendo a Gran Bretaña, el crecimiento del retail en la UE en 2016 (+1,7%) superó el aumento de los precios y, por tanto, dio lugar a un incremento real en el volumen de negocio. “Esto también debería ser posible de lograr en 2017 gracias a los bajos niveles de inflación”, señalan desde GFK. En cuanto al poder adquisitivo, los ciudadanos de los países de la UE tuvieron una media de 16.153 euros anuales disponibles por persona, lo que significa un crecimiento nominal del poder adquisitivo de un 0,7%. Sin embargo, este dato se distorsiona un poco por las disparidades de los tipos de cambio, como en el caso de la libra británica. Medido en euros, seis de los 32 países que ha analizado GFK (la UE 28, Noruega, Suiza, Turquía y Ucrania) en su estudio experimentaron reducciones en el poder de compra, aunque en la mayoría de los casos fue debido a las devaluaciones en el tipo de cambio. Además, el poder adquisitivo varía mucho según el país al que nos refiramos. Por ejemplo, los habitantes de Luxemburgo (los primeros en el ranking) disponen de 8,8 veces más ingresos per cápita que los búlgaros. Por último, desde GFK señalan que la cuota del consumo privado que los ciudadanos destinan al retail físico sigue cayendo en la UE. Esta proporción en 2016 era del 31,3% frente al 31,4% de 2015. Los europeos invierten cada vez más su dinero extra en los sectores de salud y gastronomía, pero también en las compras online y en los gastos diarios. Previsiones para 2017 Desde GFK prevén un sólido crecimiento del volumen de negocio de un 1,4% nominal para los 28 países de la UE en 2017. Si se excluye Gran Bretaña, el crecimiento alcanzaría el 2,2%. La incertidumbre les hace dudar precisamente del caso británico pero, aun así, esperan un aumento del volumen de negocio del retail físico del 2,5% en moneda nacional (-2,6% en euros). Las regiones que crecieron el año anterior también lo harán este año, con Rumanía (9,8%) y Hungría (5,7%) en cabeza. Por su parte, los retailers del oeste y sur de la UE han tenido que luchar durante años debido a la presión generada por el crecimiento del comercio online. Esto ha llevado a un incremento en los ratios de crecimiento, aunque a un nivel significativamente reducido. Un 1% en Alemania y Grecia, un 2% en Francia y un 2,9% en España.