Miguel Pajares se encuentra estable dentro de la gravedad, según han informado la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. En las primeras evaluaciones, el equipo médico que asiste al enfermo destaca que se encuentra un poco desorientado y que no tiene hemorragias, algo clave en los infectados por la enfermedad. En el vuelo […]
Dirigentes Digital
| 07 ago 2014
Miguel Pajares se encuentra estable dentro de la gravedad, según han informado la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. En las primeras evaluaciones, el equipo médico que asiste al enfermo destaca que se encuentra un poco desorientado y que no tiene hemorragias, algo clave en los infectados por la enfermedad.
En el vuelo también ha sido repatriada la religiosa española de origen ecuatoguineano Juliana Bohi, que no presenta síntomas de ébola. Ambos serán trasladados en dos ambulancias del Summa con personal y medios de aislamiento biológicos hacia el hospital.
"La seguridad está garantizada para todos los españoles", ha asegurado la directora de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, Mercedes Vinuesa, en la rueda de prensa. "Los protocolos de seguridad garantizan un riesgo mínimo para estos pacientes, para la población y para los sanitarios", ha explicado.
El Hospital Carlos III ha sido elegido por Sanidad por ser un centro especializado en enfermedades epidemiológicas. Actualmente, está coordinado y se utiliza para atender a pacientes derivados de los hospitales públicos de la Comunidad de Madrid. Los profesionales del sector han criticado la decisión de tratar a Pajares en España y el centro donde será ingresado. El presidente de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), Daniel Bernabéu, ha expresado su preocupación por la celeridad y urgencia con la que se ha realizado el acondicionamiento de las instalaciones del Carlos III, "debería haber estado en funcionamiento y con un mantenimiento regulado si la Comunidad de Madrid no hubiera decidido que este centro fuera absorbido. Ningún hospital de Madrid está preparado para el Ébola tras el desmantelamiento del Carlos III".
El médico asegura que el traslado del paciente es arriesgado. "La decisión del Gobierno es política y no sanitaria, nadie puede garantizar al cien por cien que el virus no se va a escapar. El problema básico es traer a este paciente aquí, cambiarlo de continente cuando se le podría haber prestado los mismos cuidados allí que aquí", ha explicado.
Para explicar que el hospital no dispone de las dotaciones necesarias ha puesto de ejemplo cómo ha actuado Estados Unidos, donde también se ha trasladados a varios enfermos de ébola. "Tienen diez hospitales con nivel 4 de aislamiento y aquí solo tenemos el antiguo Hospital Carlos III con un nivel 2 y elementos de nivel 3 para manejo de muestras".
El Airbus A310 medicalizado del 45 Grupo del Ejército del Aire ha partido de Torrejón de Ardoz alrededor del mediodía. Cuando llegue de nuevo a España al mismo aeropuerto se activará el protocolo de seguridad coordinado por el Ministerio de Sanidad. Pajares será trasladado en una ambulancia especialmente diseñada para estos casos; es decir: en un vehículo donde la cabina del conductor está separada del habitáculo donde va el paciente.
Los pacientes llegarán en el avión dentro de un dispositivo de aislamiento. Ese dispositivo será introducido directamente en la ambulancia sin que el paciente tenga contacto con el exterior en ningún momento hasta su llegada a la habitación de aislamiento en el Carlos III.
La habitación Pajares estará en una habitación individual con presión negativa ?que impide la salida de aire del exterior y por lo tanto la posible expansión del virus? y será atendido sólo por un médico y una enfermera. También se reubicará a los pacientes de la tercera y cuarta planta del Carlos III a centro de La Paz. El personal sanitario, como recuerda la OMS, deberá protegerse de manera integral con un mono, lavarse las manos antes y después de atender al paciente y usar máscara, guantes, gafas y calzado impermeable. Quienes trabajan en el laboratorio también corren riesgo. Por ese motivo el personal deberá ponerse ropa y máscaras protectoras específicas y deberán manipular las muestras que tomen en una cámara de seguridad biológica.