Con el crecimiento global que se espera por parte del consenso en mercados desarrollados (incluida zona euro) y emergentes, ¿piensa que es momento de invertir en renta variable a pesar de las valoraciones? Todavía queda valor por conseguir en algunos espacios de la renta fija, por ejemplo, el high yield, pero la renta variable, es […]
Dirigentes Digital
| 26 mar 2018
Con el crecimiento global que se espera por parte del consenso en mercados desarrollados (incluida zona euro) y emergentes, ¿piensa que es momento de invertir en renta variable a pesar de las valoraciones? Todavía queda valor por conseguir en algunos espacios de la renta fija, por ejemplo, el high yield, pero la renta variable, es un tipo de activo que debería salir favorecido en este entorno. En la renta variable estadounidense todavía quedan algunos segmentos que ofrecen valor, también en Europa y los mercados emergentes. Tampoco olvidamos Japón. Los flujos están mostrando que los inversores tienen más confianza en la renta variable europea. ¿Cómo puede impactar al mercado el incremento de la inflación que se espera para este año? Este es uno de los mayores interrogantes. Depende de la velocidad y la magnitud de la inflación y del impacto en los tipos. Creo en la curva de Phillips y creo que la inflación está empezando a mejorar. Los salarios están aumentando, especialmente, en Estados Unidos y esto es bueno para el consumo. También los bancos centrales seguirán tensionando su política monetaria este año si nada extraño sucede. ¿Cómo puede repercutir esto a los mercados? Siempre hay dudas sobre lo que se espera y lo que realmente ocurre. En términos de sorpresas, creo que podríamos llevarnos alguna sorpresa en Estados Unidos del hecho de que la Fed sea más ‘hawkish’ de lo que piensa el mercado. Si la inflación sube, puede influir sobre los tipos, pero el mercado no está descontando esto. En cuanto a los otros bancos centrales, el BCE no va a acelerar la salida del QE de ninguna manera porque Draghi ha luchado contra la desfragmentación de la zona euro y contra la deflación y no va a correr el riesgo de echarlo a perder. Estas medidas de las instituciones monetarias afectan a las divisas, especialmente al dólar y al euro. ¿Ve más depreciación de la moneda norteamericana en relación a su homóloga europea? La fortaleza del euro, que alcanzó casi 15% en el año, llevó a diferencias de crecimiento. No debemos descartar en ningún momento una aceleración en Estados Unidos. La sorpresa se ha visto por parte del euro. La inflación no ha sido un factor determinante, ha sido la disminución del riesgo político. Si hay sorpresas en términos de crecimiento será en Estados Unidos, con la reforma fiscal, quizá algunas sorpresas por encontrarnos al final del ciclo, debemos ser cautelosos sobre la desaceleración. En la zona euro ya está descontado, sabemos que está habiendo una aceleración. La paridad de poder de compra está en 1,3, no hay mucho espacio y Draghi va a seguir con una postura ‘dovish’ para no poner en riesgo el crecimiento. Por otro lado, ¿qué otros riesgos consideran que se deben monotorizar este año? Ya hemos mencionado la inflación, los tipos de interés y las políticas monetarias. Quizá uno que no hemos mencionado es el hecho de que Trump ha sacado adelante su reforma fiscal, una de las dos partes principales de su programa. La segunda es el proteccionismo. No debemos olvidar que habrá elecciones de mitad de mandato y se centrará más en ser reelegido. Necesita centrarse en este tema, crear ruido.