En su primer discurso sobre el estado de la nación, Trump ofreció un tono algo más moderado al observado en otros discursos, ofreciendo una mano abierta para trabajar con ambos partidos. La disputa política se mantendrá durante toda la legislatura, lo que seguirá ejerciendo presión sobre el dólar, pero esta debiera suavizarse tras el reparto […]
Dirigentes Digital
| 07 feb 2018
En su primer discurso sobre el estado de la nación, Trump ofreció un tono algo más moderado al observado en otros discursos, ofreciendo una mano abierta para trabajar con ambos partidos. La disputa política se mantendrá durante toda la legislatura, lo que seguirá ejerciendo presión sobre el dólar, pero esta debiera suavizarse tras el reparto de victorias legislativas por parte de ambos partidos. Según el informe de Perspectivas Económicas y Estrategia de Inversión de Andbank para el primer semestre de 2018’ de Andbank se espera continuidad en el impulso al alza del crecimiento, apoyado en una fuerte inversión en bienes de equipo (actualmente expandiéndose al 10,8% interanual), así como por la inusual fortaleza de un mercado laboral en tasas de desempleo del 4,1%, y con un ratio de participación disparado en el rango de 25-54 años, tras el regreso de trabajadores “desalentados” que están retornando, lo que sugiere que el mercado de trabajo es más fuerte que en otros momentos con tasas de paro similares. En este escenario de fuerte crecimiento (PIB por encima del potencial, o ouput gap positivo), el excelente comportamiento del mercado laboral estadounidense y un estímulo fiscal evidente en forma de rebaja impositiva, Andbank espera que la Reserva Federal eleve los tipos tres veces a lo largo de 2018 (con la posibilidad de que sean más, pues en el entorno actual el riesgo de sobrecalentamiento es mayor). Alex Fusté, Economista Jefe del Grupo Andbank, explica, sin embargo, que “la falta de presiones inflacionarias puede hacer que la FED sea muy gradual, quedando por detrás de la curva, y que ello pudiera obligar al banco central a tener que actuar precipitadamente después. Lo que acostumbra a tener efectos indeseados en los mercados”. En cuanto al impacto sustancial de los cambios impositivos en las ganancias corporativas, Andbank opina que “no es sorprendente que los inversores atribuyan la fuerte subida del mercado a una carga tributaria reducida”. Si los impuestos siguen siendo el factor determinante, los índices de los EE.UU mantendrían mejor el mejor tono, sin embargo, Fusté opina que “los inversores habrían puesto ya en precio el mejor de los escenarios, aumentado las expectativas en beneficios por acción en el S&P hasta los 152 dólares”. Para Andbank, los beneficios debieran moverse entre los 140-145 dólares por acción. Los sectores que más se beneficiarían de la reforma fiscal serían energía y servicios, que liderarían a otros sectores con menores cargas impositivas, como la atención médica y la tecnología. ¿Cambio de paradigma en los EE.UU? Más allá de lo puramente visible, Alex Fusté indica un aspecto que tiene que ver con el posible cambio en el funcionamiento tradicional de los mercados estadounidenses. El economista de Andbank apunta que “EE.UU tiene una posición neta en deuda negativa con el exterior por valor de unos 8 billones de dólares. Con un coste medio de esa deuda del 2,5%, la balanza externa de intereses y rentas debiera arrojar un pago anual al exterior de unos 200.000 millones”. Sin embargo, la balanza de pagos en EE.UU contabiliza un saldo positivo por rentas netas de 202.000 millones. ¿Cómo puede ser? Ello se debe a que los ingresos por dividendos recibidos desde el exterior (pagados por las empresas con capital norteamericano pero basadas en el exterior) superan con creces los intereses pagados por esa deuda neta con el exterior. Dicho de otra forma, EE.UU tradicionalmente ha vendido deuda al exterior y, con los dólares recibidos, ha venido construyendo una posición en capital (equity) en empresas en el extranjero pero de capital norteamericano. Un tejido empresarial del tamaño de la economía de China hasta hace bien poco. Como el retorno del capital (ROE) es superior al coste de la deuda (TIR), el resultado es una balanza financiera positiva, pues los dividendos recibidos superan a los intereses pagados. Esto equivale a decir que los EE.UU han venido funcionado como un colosal Hedge Fund (captando dinero con deuda e invirtiendo en equity o capital de empresas), siendo este esquema muy rentable. Como todo Hedge Fund, éste también tenía un propietario (Wall Street). El gran beneficiado de una estructura de tipos (coste de deuda bajos), de ahí nuestra visión favorable para el S&P mientras las condiciones favorecían este esquema. Ahora que observamos cambios relevantes como: un aumento en el coste de la deuda, un sesgo proteccionista, y una rebaja de impuestos (que favorece el ahorro doméstico para invertir en proyectos domésticos), y entendemos que las condiciones ya no son tan favorables para este esquema global que favorecía a Wall Street. Por ello, Andbank prefiere invertir en índices norteamericanos más domésticos (Rusell, etc…) Mercados USA