Tras la reciente presentación de los nuevos terminales de Apple, Amnistía Internacional ha lanzado una ciberacción en su centro de activismo online en la que pide a la compañía que investigue su cadena de suministro para asegurarse de que sus productos no contienen cobalto extraído en condiciones que vulneran los derechos humanos, entre ellas el […]
Dirigentes Digital
| 28 mar 2016
Tras la reciente presentación de los nuevos terminales de Apple, Amnistía Internacional ha lanzado una ciberacción en su centro de activismo online en la que pide a la compañía que investigue su cadena de suministro para asegurarse de que sus productos no contienen cobalto extraído en condiciones que vulneran los derechos humanos, entre ellas el trabajo infantil.
La organización insiste en que si la compañía no dispone de esta información debe dar los pasos adecuados para obtenerla y no mirar hacia otro lado, como si este asunto no fuera responsabilidad suya. "De comprobarse que existen violaciones de los derechos humanos en la cadena de suministro, la empresa debe tomar medidas para reparar el daño sufrido", explica el organismo.
Amnistía Internacional también pide a Apple que informe de los procesos que ha llevado a cabo para asegurar que los productos que comercializa no contienen cobalto extraído en condiciones que vulneran los derechos humanos, como el uso de mano de obra infantil o el trabajo realizado por adultos en condiciones peligrosas.
La organización asimismo se ha dirigido a Apple para que facilite los nombres de las empresas proveedoras de cobalto que participan en su cadena de suministro, incluyendo el máximo de información posible sobre el lugar y las condiciones de extracción del cobalto.
Minas mortales y trabajo infantil
La República Democrática del Congo (RDC) produce al menos el 50% del cobalto del mundo. Uno de los mayores procesadores de mineral del país es Congo Dongfang Mining (CDM), filial en propiedad exclusiva del gigante chino del comercio de minerales Zhejiang Huayou Cobalt (Huayou Cobalt). Más del 40% del cobalto que adquiere Huayou Cobalt procede de la RDC.
Amnistía Internacional presentó recientemente junto a Afrewatch una investigación que documentaba cómo Huayou Cobalt y su filial CDM procesan el cobalto antes de venderlo a tres fabricantes de componentes para baterías en China y Corea del Sur. Éstos lo venden a su vez a fabricantes de baterías que aseguran abastecer a empresas de tecnología y automóviles, entre ellas Apple, Microsoft, Samsung, Sony, Daimler y Volkswagen.
Los mineros que trabajan en las zonas donde CDM compra el cobalto corren riesgos para la salud a largo plazo y una alta probabilidad de sufrir accidentes mortales. Al menos 80 mineros artesanales murieron en los túneles en el sur de la RDC sólo entre septiembre de 2014 y diciembre de 2015. Se desconoce la verdadera cifra, pues muchos accidentes no se registran y se dejan los cadáveres enterrados bajo las rocas.
"Amnistía Internacional ha comprobado también que la gran mayoría de los mineros pasan a diario largas horas trabajando con cobalto sin el equipo de protección más básico, como guantes, ropa de trabajo o mascarillas para prevenir enfermedades de pulmón o de piel", reza el comunicado.
Por otro lado, los niños entrevistados por Amnistía Internacional dijeron que trabajaban hasta 24 horas diarias en la mina, llevando pesadas cargas, para ganar entre uno y dos dólares al día. En 2014 había alrededor de 40.000 niños trabajando en minas en todo el sur de la RDC, muchas de ellas de cobalto, según UNICEF.