Frente a las pérdidas de 607 millones que registró el año pasado, FCC ha reducido los números rojos hasta los 52,7 millones, después de afrontar el proceso de saneamiento que puso en marcha el pasado año. La compañía explica las cuentas semestrales de FCC no recogen los efectos de varias operaciones de ventas de activos […]
Dirigentes Digital
| 01 ago 2014
Frente a las pérdidas de 607 millones que registró el año pasado, FCC ha reducido los números rojos hasta los 52,7 millones, después de afrontar el proceso de saneamiento que puso en marcha el pasado año. La compañía explica las cuentas semestrales de FCC no recogen los efectos de varias operaciones de ventas de activos no estratégicos, dado que aún están pendientes de su cierre definitivo, que hubieran devuelto a la compañía a beneficios.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda), de su lado, progresó un 32,2% en el primer semestre, hasta sumar 381,6 millones de euros, impulsado por el plan de ajustes y ahorros que FCC puso en marcha el pasado año y el incremento de la rentabilidad del negocio internacional del grupo.
Además de los contratos internacionales logrados, en la primera mitad del año se produjo un nuevo avance en la progresiva normalización de los periodos de pago de las Administraciones Públicas. Concretamente, en el primer trimestre, el Grupo de Servicios Ciudadanos obtuvo 71 millones de euros correspondientes al pago de la segunda fase del II Fondo de Pago a Proveedores aprobado en julio de 2013.
El margen operativo creció hasta situarse en el 12,9% frente al 9,4% de 2013. El grupo destaca que la positiva evolución "recoge tanto el impacto de la adecuación de la estructura de producción en España en los negocios del ciclo de construcción, como a un aumento más moderado en el área de Agua, junto con un comportamiento estable en el área de Medio Ambiente".
Durante el periodo, FCC cerró la totalidad de la refinanciación corporativa del Grupo. De este modo a cierre de junio pasado se ha registrado un incremento en la maduración de la deuda financiera, con tan solo un 21,8%, clasificada a corto plazo.
Por ello, la deuda financiera neta a cierre de junio alcanzó los 6.413 millones de euros, un 7,5% más que en diciembre pasado ya que su evolución aún no refleja el impacto de las ventas de activos en curso, así como la eliminación de la expansión estacional habida en el capital circulante en el primer semestre, ambos previstos a lo largo de la segunda mitad del año.