Del 30 de septiembre al 3 de octubre, Barcelona volverá a ser la capital europea de la química aplicada con la celebración simultánea de Expoquimia, Eurosurfas y Equiplast, salones que reunirán en el recinto de Gran Via de Fira de Barcelona la oferta comercial, técnica y científica de tres industrias fundamentales para el desarrollo del […]
Dirigentes Digital
| 11 sep 2014
Del 30 de septiembre al 3 de octubre, Barcelona volverá a ser la capital europea de la química aplicada con la celebración simultánea de Expoquimia, Eurosurfas y Equiplast, salones que reunirán en el recinto de Gran Via de Fira de Barcelona la oferta comercial, técnica y científica de tres industrias fundamentales para el desarrollo del bienestar de la sociedad actual. Esta edición supone el inicio de una nueva etapa que tiene como principal objetivo ampliar su horizonte internacional durante los próximos diez años para transformarse en el futuro World Chemical Summit, evento ferial de referencia mundial en el que se den cita ciencia e industria.
En el marco de Expoquimia, se desarrollará la iniciativa Smart Chemistry Smart Future, un proyecto corporativo de la industria química española liderado por Feique y el propio Salón, en el que participan las empresas y organizaciones líderes del sector químico español. Smart Chemistry Smart Future, pretende mostrar el potencial innovador así como el carácter estratégico y competitivo de la industria química española con el fin de atraer inversiones productivas al sector.
En esta línea, Feique e Icex-Invest In Spain, organismo dependiente del Ministerio de Economía y Competitividad, han alcanzado un acuerdo de colaboración para impulsar y promover la atracción de inversiones extranjeras al sector químico en España. Ambas organizaciones presentarán, el día 3 de octubre, en el seno de Expoquimia 2014, el informe "Invest in Chemicals, Invest in Spain" que integra las diversas ventajas competitivas que ofrece España en su conjunto y el sector en particular para los potenciales inversores industriales.
Smart Chemistry Smart Future
El proyecto pretende potenciar no sólo el carácter estratégico de un sector clave para la economía española sino también poner en valor la contribución esencial de la industria química para mejorar la calidad de vida y el bienestar de nuestra sociedad y dar respuesta a sus principales retos: garantizar la disponibilidad y acceso a recursos fundamentales como la alimentación, la energía o el agua, mejorar la salud y calidad de vida de las personas, crear ciudades más sostenibles o desarrollar nuevas tecnologías.
Las empresas y asociaciones del sector participantes incorporarán sus stands corporativos alrededor de una zona común, "The Smart Place", donde se desarrollarán múltiples actividades que girarán en torno a cuatros grandes áreas temáticas de presente y futuro en las que la química tendrá una gran contribución: Smart Cities (las ciudades en las que vivimos y cómo pueden ser más eficaces y sostenibles); Energy & Water (los recursos que necesitamos para vivir); Life: health & food (los aspectos vitales más fundamentales); New technologies4U (las tecnologías que cambian nuestra vida).
Además de las actividades programadas en torno a los cuatro ejes temáticos sobre los que gira el proyecto Smart Chemistry Smart Future,cada una de estas áreas abarcará una exposición de diferentes objetos, gadgets, tecnologías, y aplicaciones concebidas para mejorar nuestro bienestar y calidad de vida y dar solución a muchas de las demandas más acuciantes de nuestra sociedad actual y en cuya fabricación la aportación de la química resulta crucial.
Invertir en el sector Químico Español
Según recogen los principales institutos prospectivos y consultoras internacionales, la industria química figura como el sector manufacturero que mayor crecimiento experimentará globalmente hasta 2030 con un crecimiento anual del 4,5%, cifra únicamente superada por el sector energético.
Esta potencialidad supone un importante estímulo para la atracción de inversiones. Por ello, la colaboración de Feique con ICEX-Invest in Spain contempla, además de la elaboración del informe "Invest in Chemicals, Invest in Spain, la promoción de los clústers químicos localizados en nuestro país, el apoyo específico para trasladar a todos los Departamentos ministeriales que se considere necesario las demandas de mejora de los factores de competitividad industriales de España y la acción de promoción de la inversión en el sector en múltiples países a través de las oficinas comerciales de España en el exterior.
Con una cifra de negocios cercana a los 56.000 millones de Euros la Industria Química Española, genera actualmente el 11% del Producto Industrial Bruto, 50.000 empleos directos indirectos e inducidos y es el segundo mayor sector exportador de la economía española con unas ventas superiores a 30.000 millones de euros en mercados internacionales a los que ya se destina más del 55% de la producción. Desde 2000 la industria química española acumula un crecimiento de su cifra de negocios del 54,5%, y su contribución al Producto Industrial Bruto se ha elevado del 9,5% al 11%, convirtiéndose en el cuarto sector industrial del país por detrás de otros sectores como la Alimentación, metalurgia y automoción.
Además de la elevada capacidad exportadora del sector químico, otro factor clave de competitividad que ofrece garantías a los posibles inversores es su capacidad innovadora y tecnológica. La industria química acumula en I+D+I el 24% de todas las inversiones que realiza la industria española en su conjunto y emplea Página 3 de 3 al 21% del personal investigador que trabaja en empresas industriales. Ambos factores determinan que sea un sector estratégico, competitivo y con proyección.
Paralelamente, las ventajas competitivas que ofrece España como país, lo convierten en una interesante plataforma donde invertir. La localización geoestratégica que le confiere un relevante potencial para acceder a otros mercados intensivos, ser el país de la UE que dispone de un mayor longitud de costa con 46 puertos internacionales con capacidad para el transporte de mercancías a escala internacional, la amplia estructura de apoyos a la inversión o los competitivos costes laborales son algunos de estos factores.