El Gobierno heleno ha establecido hoy el corralito para evitar el colapso de sus bancos, pero desde noviembre el sistema financiero se está desangrando a marchas forzadas. Según Moody’s, los depósitos se ha reducido desde noviembre en 44.000 millones de euros, una cifra que no incluye los 8.000 millones de las dos últimas semanas. Para […]
Dirigentes Digital
| 29 jun 2015
El Gobierno heleno ha establecido hoy el corralito para evitar el colapso de sus bancos, pero desde noviembre el sistema financiero se está desangrando a marchas forzadas. Según Moody’s, los depósitos se ha reducido desde noviembre en 44.000 millones de euros, una cifra que no incluye los 8.000 millones de las dos últimas semanas.
Para contextualizar la magnitud de la descapitalización de los bancos griegos, hay tener en cuenta que el PIB anual de Grecia asciende a 182.000 millones. En ocho meses, han salido del sistema lo equivalente al 24% del PIB.
Hasta ahora lo que ha mantenido en pie a las entidades ha sido el programa de liquidez de emergencia del BCE. La institución ha inyectado 89.000 millones a los bancos. Sobre todo las últimas semanas las salida de capital, han quedado cubiertas por Frankfurt con continuos aumentos de fondos.
El problema viene a partir de la próxima semana. El control de capitales se mantendrá hasta después del referéndum con lo que la hemorragia está contenida por días. Pero el BCE no aumentará más el saldo del programa de liquidez, aunque lo mantiene hasta nueva orden.
A la debilidad de los bancos se une los vencimientos de deuda. Además de los 1.500 millones de mañana, debe afrontar 6.700 millones de reembolsos al BCE entre julio y agosto.