El mes pasado funcionarios judiciales y un organismo avalado por la ONU desmantelaron una estructura criminal que recibía sobornos de importadores para evitar el pago de impuestos de aduana. La trama ha adquirido el nombre de "La Línea". La supuesta trama criminal operaba dentro de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), donde ingresaron más de […]
Dirigentes Digital
| 26 ago 2015
El mes pasado funcionarios judiciales y un organismo avalado por la ONU desmantelaron una estructura criminal que recibía sobornos de importadores para evitar el pago de impuestos de aduana. La trama ha adquirido el nombre de "La Línea".
La supuesta trama criminal operaba dentro de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), donde ingresaron más de 500 contenedores de manera ilegal. Los empresarios que apelaban a "La Línea" pagaban solo una parte del impuesto establecido en las aduanas gracias a la red. De momento, la cantidad de dinero defraudado aún no ha sido desvelado, pero las autoridades calculan que rondarán los varios millones de dólares.
Según informan medios locales, la mención en algunas de las más de 66.000 escuchas realizadas en Guatemala en una investigación sobre corrupción de "La R", "La señora" o "La 2" hicieron que las autoridades sospecharan de la vicepresidente del Gobierno, Roxana Baldetti. Ante el escándalo, Baldetii presentó su dimisión el pasado 8 de mayo "por motivos personales". Finalmente, la ahora ex vicepresidenta ha sido detenida.
Ahora, las investigaciones apuntan al presidente del Gobierno Otto Pérez como presunto cabecilla de la banda de defraudación aduanera junto con su número 2, Baldetti. "Tenemos que decirlo, muy lamentablemente, pero al frente de la estructura está el señor presidente de la República, Otto Pérez Molina, y la señora vicepresidenta en aquel entonces Ingrid Roxana Baldetti", aseguró en rueda de prensa Iván Velásquez, jefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
Según informan medios del país, la fiscal general, Thelma Aldana, afirmó que tienen grabaciones en los que el dirigente conversa con miembros de la trama criminal, por lo que esperan acusar al presidente de asociación ilícita y cohecho pasivo. La fiscalía ya ha solicitado que se le retire la inmunidad por su presunta participación con el fraude aduanero.
Supuestamente, Juan Carlos Monzón, el ahora prófugo ex secreatrio privado de Baldetti, se encargaba de entregar los sobornos a la ex vicepresidenta y a Pérez Molina. Al parecer, ambos cargos habrían recibido más de 260.000 dólares en sobornos.
Ante estas nuevas acusaciones, el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, ha confirmado que no renunciará al cargo. Mientras tanto, cinco de sus ministros ya han presentado su dimisión al declararse "traicionados y decepcionados". "Declaro categóricamente que rechazo mi vinculación a la misma, haber recibido dinero alguna de esa operación de defraudación aduanera, mi conciencia está tranquilita en ese sentido", ha explicado el presidente. Eso sí, también ha pedido disculpas públicas y ha reconocido que en su gobierno ha habido corrupción.
Diversos sectores de la población, entre ellos el empresarial, ya han exigido la salida del presidente del Gobierno. Ahora, la Corte Suprema del país ha determinado por unanimidad dar trámite a la solicitud de antijuicio presentada contra él, presentada por el Ministerio Público y la CICIG.