Las impresiones que el interlocutor se forme en los primeros cinco minutos serán las que perduren en su memoria visual y condicionarán las relaciones posteriores, algo fundamental, por ejemplo, en las entrevistas de trabajo o negociaciones. La comunicación no verbal es inevitable e involuntaria, y depende en un alto grado de la cultura de cada […]
Dirigentes Digital
| 28 mar 2017
Las impresiones que el interlocutor se forme en los primeros cinco minutos serán las que perduren en su memoria visual y condicionarán las relaciones posteriores, algo fundamental, por ejemplo, en las entrevistas de trabajo o negociaciones. La comunicación no verbal es inevitable e involuntaria, y depende en un alto grado de la cultura de cada sociedad. La empresa de estrategias de comunicación Paz Herrera Studio apunta siete aspectos sobre comunicación no verbal: 1. El saludo. En una negociación, el interlocutor que hable durante más tiempo en los primeros minutos, es muy probable que domine la intervención. Por eso el saludo es fundamental; lo correcto es “buenos días” o “buenas tardes”, estrechar la mano de manera breve y firme durante un máximo de 3 segundos, mirando a los ojos y esbozando una ligera sonrisa. 2. Cómo sentarse. Apoyar ligeramente la espalda en el respaldo con los pies en el suelo y quietos. Sentarse en el borde de la silla denota nerviosismo. 3. Posición en la mesa. Si se ocupan los extremos opuestos en una mesa se genera tensión y distanciamiento, ya que dos personas enfrentadas van a competir. La posición de colaboración es sentarse uno junto a otro pero el interlocutor puede interpretarlo como una invasión. La posición en ángulo genera un entorno amistoso e informal. 4. La mirada. Se debe aguantar pero no fijarla de manera persistente o desafiante, ya que son un signo de amenaza. Con las miradas también se puede indicar el turno de palabra haciendo que la conversación sea fluida. 5. Las manos. Juguetear con las manos o apretarlas son un signo de nerviosismo. Entrelazar los dedos acompañados de una sonrisa puede significar frustración o una actitud negativa en un intento de disimulo. Cuanto más alto se haga el gesto con respecto al resto del cuerpo, mayor rechazo y defensa representan. 6. Los brazos. Cruzados con los puños cerrados muestran una actitud hostil y cruzados sujetándolos con las manos transmiten tensión. Se pueden cruzar de forma disimulada llevando la mano al reloj o sujetando una carpeta, por ejemplo. 7. Las mentiras. Algunos gestos pueden denotar que mentimos o nos mienten: rozarse la boca o la nariz sutilmente, desviar la mirada frotándose los ojos, mirar al suelo esbozando una sonrisa falsa, mantener los dientes apretados, tirarse del cuello de la camisa o frotarse la oreja. El objetivo de una negociación es llegar a un entendimiento por lo que también es importante cuidar la expresión oral controlando la entonación, el volumen, la velocidad, la fluidez y el tono a la hora de hablar.