"El crecimiento mundial será menor de lo previsto ante la mayor desaceleración de los emergentes y el repunte de las tensiones financieras", indican desde la entidad, donde reconocen que los bancos centrales están preocupados por "el descarrilamiento de los mercados financieros a largo plazo". Primero, porque esa tensión se puede trasladar a una mayor desconfianza […]
Dirigentes Digital
| 09 sep 2015
"El crecimiento mundial será menor de lo previsto ante la mayor desaceleración de los emergentes y el repunte de las tensiones financieras", indican desde la entidad, donde reconocen que los bancos centrales están preocupados por "el descarrilamiento de los mercados financieros a largo plazo". Primero, porque esa tensión se puede trasladar a una mayor desconfianza hacia la recuperación económica. Y segundo, porque puede impactar directamente en la economía real vía consumo al reducir la renta de los inversores.
Especialmente preocupados se muestran sobre la desaceleración china y la caída de las materias primas, que castigarán a países como Brasil y Rusia. "Otros como India se podrían ver más beneficiada por ese abaratamiento", indican.
Aún así, considera que hay que mirar más allá de los picos de volatilidad que persistirán en los próximos meses, apostando firmemente por la renta variable en cartera. Es de las pocas clases de activo a la que aún ven potencial, frente al activo monetario y a la renta fija soberana, especialmente con grado de inversión. "La de países periféricos puede aportar un plus de rentabilidad al estar apoyados por las compras del BCE".
Aunque la Bolsa española está entre sus favoritas, advierten que la incertidumbre política puede pesar en el mercado. Pero achacan el peor comportamiento del Ibex frente a otros selectivos como el italiano más a las elecciones generales que a las catalanas. Aún así, recuerdan que "la incertidumbre, sea política o no, es lo peor que le puede pasar al mercado". Y en el caso español, aseguran que "no se trata tanto del color del partido que gobierne, sino de que el Gobierno que salga sea estable".
La economía española, para la que estiman un crecimiento del 3,1% para este año, también debe hacer frente a otros riesgos que podrían perturbar la confianza de los inversores. Entre ellos, el escaso margen de reducción del déficit público "que en los últimos tres años apenas ha caído", así como el elevado endeudamiento y la alta tasa de desempleo. "La deuda representaba 2,8 veces el PIB a cierre de 2014 y la tasa de paro, aunque ha bajado más de 2,5 puntos, se encuentra por encima del 22%", explican desde la entidad.
Estrategias a través de fondos
En un escenario en el que los bancos centrales seguirán apoyando al mercado, descartando que la Fed suba tipos en su próxima reunión de este mes (aunque sí antes de final de año), Miguel Ángel García, responsable de March AM recomienda fondos de retorno absoluto de baja volatilidad "que sean transparentes y líquidos" para sustituir la escasa rentabilidad que se podrá lograr con tesorería.
Entre los productos que ofrece la entidad, el directivo ha destacado la buena marcha de su gama de perfilados, así como las cinco apuestas que la casa mantiene desde comienzos de año, en las que habían introducido más riesgo para aprovechar las buenas previsiones sobre la renta variable.
Entre las propuestas están nombres tan conocidos como su fondos de renta fija a corto plazo FonMarch y el de renta variable europea March Europa Bolsa, que desarrolla su estrategia a través de una gestión value. La gestora también mantiene su apuesta por el March Vini Catena, el fondo que invierte en empresas de la cadena de valor del vino, y el Family Businesses Fund, centrado en empresas familiares.
Entre sus Sicav destaca Bellver Sicav, con una política conservadora en renta variable, por su mayor exposición a las Bolsas frente a otras alternativas de inversión. Históricamente ha obtenido una rentabilidad cercana al 5% con una volatilidad que también ronda el 5%.