Las buenas previsiones sobre el futuro de Latinoamérica están reactivando el apetito inversor y motivando a las empresas a pedir crédito en el mercado. Si 2016 ya se cerró con cifras muy alentadoras, la deuda emitida alcanzó los 129.000 millones de dólares (115.000 millones de euros) (+61%), este año ha comenzado rompiendo máximos históricos. Sólo […]
Dirigentes Digital
| 02 jun 2017
Las buenas previsiones sobre el futuro de Latinoamérica están reactivando el apetito inversor y motivando a las empresas a pedir crédito en el mercado. Si 2016 ya se cerró con cifras muy alentadoras, la deuda emitida alcanzó los 129.000 millones de dólares (115.000 millones de euros) (+61%), este año ha comenzado rompiendo máximos históricos. Sólo en el mes de enero se ofertaron hasta 24.200 millones de dólares (21.600 millones de euros), su mayor récord en un sólo mes, según los datos de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) de la ONU. Aunque el ritmo de las emisiones se fue rebajando durante febrero y marzo, la deuda total alcanzó los 45.400 millones de dólares (40.600 millones de euros) durante el primer trimestre, un 53% superior a la del mismo periodo de 2016. La aceleración en las emisiones vino garantizada por unas rentabilidades muy bajas, muy cercanas a las de la deuda pública, aunque la calidad del crédito en la región siguió deteriorándose; con hasta once rebajas del rating soberano y tan sólo dos subidas. La mayor parte de las obligaciones fueron emitidas en dólares, hasta el 78%, lo que podría generar un problema si EEUU continúa con las subidas de los tipos y su moneda se sigue apreciando, explica el documento. Sin embargo, cada vez son más las divisas que entran a cotizar en estos mercados, como el euro, el peso chileno, el sol peruano o el real brasileño. Como datos relevantes, cabe destacar el impulso de las petroleras total o parcialmente nacionalizadas, que emitieron hasya 2.000 millones de dólares (1.782 millones de euros). Por otro lado, los ‘bonos verdes’ acapararon hasta el 4% del mercado. Argentina lideró las emisiones (29%), seguida por Brásil (22%) y por México (18%).