De los tres criterios establecidos por la Comisión Europea para regular un mercado, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha determinado que el mercado de las operadoras móviles virtuales en España cumple sólo uno de ellos, por lo que estaría preparado para funcionar por si solo, a expensas de algunas excepciones puntuales. […]
Dirigentes Digital
| 17 abr 2017
De los tres criterios establecidos por la Comisión Europea para regular un mercado, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha determinado que el mercado de las operadoras móviles virtuales en España cumple sólo uno de ellos, por lo que estaría preparado para funcionar por si solo, a expensas de algunas excepciones puntuales. En la resolución, difundida la semana pasada, la CNMC reconoce que los tres principales operadores de telecomunicaciones en España (Telefónica, Orange y Vodafone), son los únicos que disponen de frecuencia de ámbito nacional (alta y baja) y de un volumen de espectro suficiente. En consecuencia, solo existen estos tres potenciales oferentes en el mercado mayorista de acceso móvil mediante infraestructuras propias. Es decir, concluye que existen excesivas barreras de entrada a nuevos oferentes en el mercado de cobertura móvil. El regulador afirma que no se detectan indicios que den pie a pensar que los obstáculos “puedan ser vencidos en un horizonte cercano”, pese a que la propuesta de la CE de liberar la banda de 700 MHZ antes de junio de 2017 abriría la puerta de las frecuencias en las bandas más bajas a nuevos operadores. La segunda premisa que debería cumplirse para continuar regulando el sector es contar con una estructura de mercado que no tienda hacia la competencia efectiva. Sin embargo, según el análisis realizado por la CNMC, el mercado español si tiende hacia una competencia efectiva. Para llegar a tal conclusión la Comisión alega que este sector está sujeto a unas obligaciones regulatorias que han permitido a los operadores tradicionales y los OMVs llegar a acuerdos comerciales y establecer condiciones económicas muy diferentes entre sí. Las nuevas ‘telecos’ afirma por su parte que, aunque los contratos suscritos con las grandes incorporan de manera generalizada previsiones relativas a la inclusión de los nuevos servicios que puedan ir desarrollándose en el mercado de las telecomunicaciones, la introducción de la tecnología 4G, por poner un ejemplo, está siendo desigual, al no extenderse a la totalidad de los OMVs. Sin embargo, la CNMC explica que la regulación del mercado 15 ya dibuja un marco adecuado para que estos agentes minoritarios puedan solicitar a cualquiera de los grandes, el acceso a su servicio 4G. El regulador español destaca además, que una estrategia conjunta de denegación de acceso no estaría en línea con los movimientos observados a lo largo de los últimos años en el mercado, donde los operadores móviles virtuales “compiten por albergar en su red a los operadores alternativos más atractivos”. El presidente de AOTEC, Antonio García Vidal, considera por su parte que la desregulación “puede ser muy perjudicial para la competencia y, por tanto, para el consumidor final”, en forma de subidas tarifarias, y ha señalado que “la asociación denunciará la dilación excesiva de las grandes compañías propietarias de red a la hora negociar acuerdos, cualquier subida injustificada de precios mayoristas, o la retirada del acceso a la red a los OMV” Por último la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia cree que la legislación sobre competencia vigente en la actualidad es suficiente para abordar las deficiencias que pudieran afectar al mercado, por lo que no haría falta una sobre regulación. “La nueva configuración de los mercados de comunicaciones móviles a raíz de los procesos de consolidación, el reducido número de conflictos planteados a lo largo de los últimos años, así como la clarificación de algunas de las principales cuestiones que subsistían en las relaciones contractuales entre los operadores móviles tradicionales y los OMVs permiten asumir que, de darse, los posibles comportamientos anticompetitivos no tendrán un carácter generalizado”, concluye la Comisión. Desde la Asociación Española de Operadores de Telecomunicaciones Empresariales se alerta de que la recientemente anunciada eliminación por parte de la CNMC de las obligaciones impuestas a los operadores móviles con red de abrir sus redes a los OMVs, que tanto ayudó en el pasado a reducir los precios para los usuarios del servicio móvil, “podría provocar una reducción del número de operadores móviles virtuales que operan en España, y dificultar aún más la aparición de nuevas propuestas en el mercado”. Situación del mercado El mercado móvil español ha pasado de contar con sólo tres competidores que podían prestar servicios de telefonía móvil de forma autónoma al disponer de sus propias redes (Telefónica, Vodafone y Orange) a presenciar la irrupción de un número elevado de agentes, incluyendo a Yoigo que como se ha señalado presta sus servicios a través de su propia red. Actualmente se encuentran activos 13 operadores móviles virtuales completos, 20 OMVs prestadores de servicios y Yoigo. En los últimos años, estas ‘telecos’ virtuales han adoptado modelos de negocio sustancialmente diferentes, adaptándose a las necesidades concretas de sus clientes. El mercado español de telecomunicaciones se caracteriza por un nivel de portabilidad elevado. De hecho, el ratio entre líneas portadas por año y el promedio de líneas total anual se ha situado de manera persistente por encima del 10% anual, muestran los datos recogidos por la CNMC. El mercado móvil es un mercado maduro donde la capacidad de ganar cuota depende de forma decisiva de la capacidad de captar clientes de los competidores. Los OMV han sido los agentes que mayor capacidad de captación de clientes a costa de los competidores han mostrado entre 2011 y 2015, seguidos por Yoigo. Orange es el único de los operadores tradicionales con un saldo positivo en este periodo. El operador más perjudicado ha sido Telefónica, que perdió cerca de cuatro millones de líneas móviles en favor de sus competidores entre 2011 y 2016. En marzo de 2016 la cuota conjunta (en términos de líneas móviles) de Yoigo y los OMV superaba el 17%, situándose 5 puntos porcentuales por encima de la cuota que alcanzaban en 2011. La reducción en la cuota de los OMVs que se observa a partir de 2015 es consecuencia, en gran parte, de la adquisición de Jazztel por parte de Orange. Esta operación se vendría a sumar a la compra de Ono por Vodafone en 2014, que supuso un parón en la ganancia de cuota de mercado por parte de los OMV al desaparecer dos de los principales agentes activos en el mercado En cuanto a los ingresos por los servicios tradicionales de telefonía móvil (acceso, voz y SMS), la cuota de Telefónica se ha reducido en 14 puntos desde 2011, mientras que la participación conjunta de Yoigo y los OMVs ha aumentado significativamente, pasando de una cuota conjunta cercana al 8% en 2011 a una cuota del 16%.