En un reciente informe de estrategia, Jacco de Winter, senior financial editor de ING Investments Management, explica que el crecimiento en estas economías no acaba de arrancar y las reformas aún no son del todo convincentes. "En lugar de optar por las reformas y creación de condiciones óptimas para el crecimiento futuro, los responsables de […]
Dirigentes Digital
| 31 mar 2015
En un reciente informe de estrategia, Jacco de Winter, senior financial editor de ING Investments Management, explica que el crecimiento en estas economías no acaba de arrancar y las reformas aún no son del todo convincentes. "En lugar de optar por las reformas y creación de condiciones óptimas para el crecimiento futuro, los responsables de las políticas monetarias optan por el camino fácil, es decir, estimular el crecimiento a través de divisas más competentes. Esto es una estrategia arriesgada", advierte el analista.
Y esta depreciación de las divisas ha hecho que los flujos de capital se hayan deteriorado en medio de la depreciación de las divisas. En este escenario, recuerda que el entorno de liquidez ha sido el principal apoyo para la deuda emergente durante los últimos meses. "Incluso en las semanas pasadas, cuando la rentabilidad de los bonos americanos subió 40 puntos básicos, la búsqueda de la rentabilidad permaneció fuerte. La deuda emergente en moneda local se vio beneficiada, al igual que los bonos high yield de mercados desarrollados", explica.
Desde la entidad insisten en el mejor comportamiento de la deuda emergente denominada en moneda fuerte, ante el ligero rebote del precio del petróleo desde la última semana de enero, "ya que la deuda emergente en moneda fuerte había sufrido mucho las caídas del precio de petróleo con anterioridad". Pero las perspectivas de deterioro de las divisas locales emergentes, también han jugado un papel importante.
A juicio de Jacco de Winter, dos aspectos clave han cambiado en las últimas semanas. "En primer lugar, el momentum de crecimiento de los mercados emergentes ha empeorado muchísimo. Nuestro indicador de momentum de crecimiento de mercados emergentes ha caído en picado durante las últimas semanas, después de haberse mantenido estable en posición neutral durante varios meses". El experto explica que de los 18 mercados del índice, sólo Tailandia, Chile y México presentan un momentum de crecimiento positivo. Los otros 15 son negativos o neutrales. El peor caso se encuentra en China, Indonesia y Rusia.
El segundo aspecto que señala es la estrategia de los bancos centrales de estos países, recordando que 12 de las principales 16 economías emergentes siguen ahora un camino de flexibilidad cuantitativa. "Esto es el resultado de un débil crecimiento e inflación a la baja, y porque los responsables de las políticas monetarias quieren compensar los menores precios de las materias primas y la pérdida de competitividad con tipos de cambio más débiles". La caída de los precios ha obligado a países como Nigeria a dejar de defender su divisa, mientras que Azerbaijan devaluó la suya (un 33%) por primera vez desde 1999.
"El miedo que hemos tenido durante años de que finalmente los tipos de cambio emergentes se tendrían que depreciar muchísimo para realmente reflejar el deterioro de los fundamentales emergentes, se hace cada vez más patente", explica de Winter.