Lejos parecen quedar los tiempos en los que Latinoamérica sorprendía con unas cifras de crecimiento cercanas a los dos dígitos. A diferencia de esos años, la región se muestra mucho más comedida y con un avance más lento. El conjunto de países que forman la región tendrá un crecimiento del 1,6% durante este 2015, mientras […]
Dirigentes Digital
| 13 ene 2015
Lejos parecen quedar los tiempos en los que Latinoamérica sorprendía con unas cifras de crecimiento cercanas a los dos dígitos. A diferencia de esos años, la región se muestra mucho más comedida y con un avance más lento.
El conjunto de países que forman la región tendrá un crecimiento del 1,6% durante este 2015, mientras que para el próximo año se espera que repunte un 2,8%, según las previsiones de Citi. Tras perder el brillo de años anteriores, Latinoamérica tiene que "conformarse" con un crecimiento más modesto comparado con otras regiones como Asia, que crecerá en torno a un 6,1% durante los dos próximos años, o países como Reino Unido, cuyas previsiones de crecimiento para este año rondan el 3%. Aún así, Latinoamérica presenta un potencial mayor que otras regiones como la zona euro, que crecerá un leve 1,2% durante 2015.
A dos velocidades
Pero no toda la región crece al mismo ritmo. Los países exportadores de materias primas, muy ligados al tirón de China, se verán más favorecidos siempre y cuando el precio del petróleo se estabilice.
Mientras el "oro negro" sigue su descenso, los analistas del banco de inversión estadounidense se muestran "neutrales" antes las perspectivas de la región ya que los beneficiarios de un crudo a la baja serán los países del continente asiático mientras que los emergentes y Latinoamérica se verán perjudicados.
Aunque se intente analizar la región al completo, es inevitable fijarse en los países que más peso tienen, como son Brasil y México. En concreto, Citi ha rebajado sus previsiones sobre el PIB de Brasil desde un 1% hasta un 0,5% para este 2015. Además, los expertos creen que el país presidido por Dilma Rousseff también se verá afectado por los previsibles movimientos en sus tipos de cambio, una rebaja del crédito y la inevitable contracción fiscal.
En cambio, Citi espera que el crecimiento de México se acelere hasta el 3,4%. En cuanto a los beneficios empresariales, la entidad estima que subirán en torno a un 13% durante este 2015 en Brasil, debido en parte a las expectativas de inflación y a la "dolarización" de sus empresas, ya que la mayoría exporta sus productos. En México, en cambio, el consenso espera que los resultados corporativos repunten un 16% por el tirón del IPC.