México, dentro de Latinoamérica, está en el ‘ojo del huracán Trump’. Capital Economics espera más inflación y tipos más alto, y un menor crecimiento, sí, “pero no la recesión que auguran muchos expertos”. Para el resto de países, recuerdan, Estados Unidos apenas es un 3% o un 4% de sus exportaciones: China sigue siendo su […]
Dirigentes Digital
| 29 nov 2016
México, dentro de Latinoamérica, está en el ‘ojo del huracán Trump’. Capital Economics espera más inflación y tipos más alto, y un menor crecimiento, sí, “pero no la recesión que auguran muchos expertos”. Para el resto de países, recuerdan, Estados Unidos apenas es un 3% o un 4% de sus exportaciones: China sigue siendo su mayor socio comercial, afirman estos analistas. “Es posible que la incertidumbre pese sobre la inversión en Latinoamérica, pero probablemente el impacto se vea ‘empequeñecido’ por otros factores, especialmente la pérdida de momentum del gigante asiático y los movimientos en las materias primas (la subida en los precios se ha tomado un respiro, aunque debería ser más fuerte)”, detallan. Así, más allá de México, siguen esperando que Brasil y Argentina salgan de la recesión en los próximos trimestres; y que Colombia Perú y Chile sigan creciente a lo largo de 2017-2018. Sí revisan sus previsiones para las divisas de Latinoamérica. Desde el triunfo del magnate la mayor parte de las monedas han caído entre un 5% y un 7% frente al dólar. Así, reducen sus estimaciones para el real brasileño a 3,35 dólares y para el peso chileno a los 676 (3,25 y 625 anterior, respectivamente). Con todo, la firma cree que la mayor parte de la depreciación ya ha sucedido. “No esperamos, de hecho, ninguna medida importante de proteccionismo comercial (…) e incluso no descartamos que suban en los próximos 12 meses frente al ‘billete verde’ a medida que las perspectivas económicas mejoren y las vulnerabilidades externas sigan disminuyendo”. “La mayor parte de las malas noticias ya han sido descontadas”, concluyen. En este sentido, recordemos que Mark Mobius, de Franklin Templeton, apuntaba que “algunas personas pueden estar expresando demasiado pesimismo y miedo”. Sentimientos que podrían no estar justificados “si tenemos en cuenta la naturaleza de la economía de Estados Unidos y los controles y sistemas de equilibrio de su sistema político”. Es más, añadía, si el republicano “pudiera lograr el tipo de crecimiento que ha prometido (…) México y otros emergentes probablemente se vean beneficiados”.
Por su parte, Michiel Verstrepen, economista de Degroof Petercam, reconoce que Trump es un riesgo para las economías en desarrollo, si bien, matiza: “Los detalles de su política todavía no están claros. Gran parte dependerá de la composición del gabinete, la relación con el Congreso y cómo su administración trabajará con los aliados internacionales. Por ahora, prevalece la incertidumbre”.