Los efectos de la crisis que comenzó en 2008 siguen coleando. Al menos, eso es lo que muestran los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que apuntan a que la población española desciende por el mayor número de fallecidos y de emigrantes. En concreto, el INE muestra que 50.844 españoles se marcharon entre enero […]
Dirigentes Digital
| 04 dic 2015
Los efectos de la crisis que comenzó en 2008 siguen coleando. Al menos, eso es lo que muestran los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que apuntan a que la población española desciende por el mayor número de fallecidos y de emigrantes.
En concreto, el INE muestra que 50.844 españoles se marcharon entre enero y junio de este año, un 23,1% más que en el semestre anterior. Entre los países receptores de la emigración española destacan Reino Unido, Francia y Alemania. Esto hace que en la primera mitad del año, la población ascendiera a 46.423.064 habitantes.
A pesar de todo, se trata del saldo migratorio negativo más bajo desde 2010, años en el que comenzó a registrarse este fenómeno.