El último estudio realizado por Baker & McKenzie reflejaba que la inversión china en Francia había crecido un 160% en 2015, alcanzando los 3.620 millones de dólares. Aunque es una cantidad pequeña en comparación con los 15.300 millones que invierten en Estados Unidos, los analistas apuntan a que la apuesta de China por Francia seguirá […]
Dirigentes Digital
| 23 mar 2016
El último estudio realizado por Baker & McKenzie reflejaba que la inversión china en Francia había crecido un 160% en 2015, alcanzando los 3.620 millones de dólares. Aunque es una cantidad pequeña en comparación con los 15.300 millones que invierten en Estados Unidos, los analistas apuntan a que la apuesta de China por Francia seguirá subiendo.
Así explicaba esta apuesta china el secretario general de la Cámara de Comercio en París, Yan Jufen, a Bloomberg: "Simplemente hay buenos acuerdos por hacer. En todos los sectores, tanto la cantidad como el número de inversiones han crecido. Los inversores chinos apuestan por cualquier cosa que se pueda poner a trabajar".
Con una economía en desaceleración y Francia ofreciendo activos denominados en euros y unas perspectivas estables, los inversores chinos han entrado a comprar desde viñedos en Burdeos hasta hoteles o centros comerciales. Según Bloomberg, más del 80% del dinero chino que entra en Francia se destina al inmobiliario y a la industria hostelera.
Un ejemplo de esta apuesta china es Jack Ma, fundador de Alibaba, que acaba de comprar el productor de vinos Chateau de Sours. También el magnate Wang Jianlin ha desarrollado el complejo EuropaCity, un proyecto comercial y de ocio al norte de París de 3.000 millones de euros. Wang Jianlin declaró cuando anunció el acuerdo que llevaban mucho tiempo queriendo entrar en Francia con un proyecto así.
También las grandes empresas francesas se fijan en China para conseguir financiación. El grupo china HNA acaba de adquirir el 10% del operador turístico francés Pierre&Vacances-Center Parcs por unos 25 millones de euros, al tiempo que anunció que financiaría otros cinco proyectos en China con 1.000 millones de euros.
Otro ejemplo es el grupo hotelero chino Jijiang International, que ha aumentado su participación en el grupo hotelero francés Accor al 11,7% y se ha convertido en el principal accionista. Además, este grupo chino también adquirió el año pasado el grupo Louvre Hotels.
Según explica Stephane Davin, uno de los socios de Baker & McKenzie, la inversión china va más allá del turismo y el ocio en Francia. En 2014, por ejemplo, Dongfeng Motor compró una participación en el grupo francés PSA Peugeot Citroën. Un consorcio liderado por la china Shandong Hi-speed compró una participación minoritaria en el aeropuerto de Toulouse o también Alcatel vendió uno de sus negocios a la estatal china Huaxin.
Francia se coloca como el segundo mayor receptor de fondos chinos en Europa por detrás de Italia, que ha escalado puestos tras la adquisición de una participación en Pirelli por parte de ChemChina.
Sin embargo, el gasto turístico de los ciudadanos chinos sí ha descendido en Francia. Aunque las llegadas de turistas chinos a la región de París, por ejemplo, creció un 40% en 2015, las llegadas cayeron tras los atentados de París del 13 de noviembre según la Oficina de Turismo de París. Según una estimación de UBS, el gasto de los turistas chinos ha caído alrededor de un 7% en el primer trimestre en Europa debido en gran medida a una caída de este en los viajes a Francia. El banco estima que el gasto chino en Francia cayó un 10% solo en febrero. Desde las organizaciones turísticas francesas se muestran, no obstante, optimistas con las llegadas de turistas chinos a medida que crece la clase media en el gigante asiático.