Los inversores no las tienen todas consigo

Los principales índices de los mercados de valores europeos cerraron ayer a la baja con la excepción del Dax alemán, que lo hizo ligeramente al alza. Tal y como esperábamos, la sesión en Europa se inició al alza, siguiendo de esta forma la estela dejada por Wall Street el viernes. La publicación el viernes en Estados Unidos de la lectura preliminar de septiembre del índice de sentimiento de los consumidores, que se situó a su nivel más bajo en un año y que estuvo muy por debajo de lo esperado, "ha convencido" a los analistas e inversores de que la Reserva Federal (Fed) no subirá tipos en la reunión de su Comité de Mercado Abierto (FOMC) que comienza mañana y que finalizará el jueves. Este fue el principal motivo que animó el viernes a los inversores a tomar posiciones de mayor riesgo y que ayer permitió a las Bolsas europeas abrir al alza. Sin embargo, y como dijimos que podría suceder, poco a poco la renta variable europea fue perdiendo fuerza, en un ambiente de muy baja actividad, ya que muchos inversores siguen al margen de los mercados, a la espera de que se disipen las incertidumbres. En este giro a la baja de las Bolsas europeas tuvo también mucho que ver el negativo cierre de la Bolsa china, lastrada por la publicación este pasado fin de semana de algunas cifras macro en China (producción industrial e inversión en capital fijo) que estuvieron por debajo de lo esperado y que constatan la ralentización del crecimiento económico del país, poniendo en riesgo el objetivo oficial, que sigue siendo de un crecimiento del PIB en 2015 del 7%. La publicación en la Zona Euro de la producción industrial de julio, que superó sensiblemente lo esperado por los analistas, y la revisión al alza de los datos de junio pasaron desapercibidos para unos inversores que siguen centrados en lo que pueda decidir hacer la Fed en materia de tipos de interés.

En este sentido, señalar que el porcentaje de analistas que espera ahora que la Fed inicie su proceso de subidas de tipos en septiembre es inferior al 25%, cuando hace un mes superaba el 40%. Ello es consecuencia, principalmente, de la inestabilidad en los mercados financieros mundiales, ya que los analistas no creen que la Fed tenga prisas por incrementar sus tipos de interés en un entorno de mercado tan complejo. 

Dicho esto, señalar que la caída ayer de Wall Street, también en un ambiente de escaso volumen de contratación, muestra que los inversores "no las tienen todas consigo", y que prefieren esperar a conocer la decisión de la Fed antes de tomar nuevas decisiones de inversión. Creemos que el comportamiento de ayer de la renta variable occidental va a ser la tónica hasta que el jueves por la tarde, ya con las bolsas europeas cerradas, se conozca la decisión de la Fed y que su presidenta, Janet Yellen, transmita a los inversores la visión del banco central estadounidense de la situación actual y futura de la economía de los EEUU, de los acontecimientos que están teniendo lugar fuera de sus fronteras y de cómo éstos pueden impactar en ella. 

Hasta entonces, por tanto, esperamos una muy baja actividad en las Bolsas, con los inversores escrutando cada dato macroeconómico que se publique en EEUU para intentar adivinar lo que finalmente hará la Fed. Hoy en EEUU se publicarán dos cifras macro importantes: las ventas minoristas y la producción industrial, ambas de agosto, que "aclararán" algo más el escenario macro estadounidense. Antes, y en Europa, se publicarán los índices ZEW de septiembre, que miden el grado de confianza de los analistas y de los grandes inversores en la marcha de la economía alemana. Se espera que tanto el subíndice de situación actual como el de expectativas bajen ligeramente frente a los niveles de agosto, lastrado por el mal comportamiento de las bolsas mundiales en las últimas semanas. Cualquier sorpresa al respecto (unos índices ZEW por encima de lo esperado) entendemos que serán muy bien recibidos por los inversores. Para empezar, esperamos que las bolsas europeas abran ligeramente al alza, pero sin una tendencia clara. Posteriormente, y como viene siendo la norma en las últimas semanas, será Wall Street la que determine la tendencia que adopten durante la sesión y hasta el cierre de la misma. 

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