En el entorno actual, la firma redobla su apuesta por la renta variable europea y por los fondos de inversión como vehículo idóneo para acceder a ella. "Grecia afecta a la volatilidad del proceso en Bolsa, pero al final, pesan mucho más otros factores como el programa de quantitative easing (QE) del BCE, la mejora […]
Dirigentes Digital
| 03 mar 2015
En el entorno actual, la firma redobla su apuesta por la renta variable europea y por los fondos de inversión como vehículo idóneo para acceder a ella. "Grecia afecta a la volatilidad del proceso en Bolsa, pero al final, pesan mucho más otros factores como el programa de quantitative easing (QE) del BCE, la mejora de los datos macro o la recuperación de los resultados empresariales". Esta es la base que fundamenta la completa confianza que los expertos de Tressis mantienen sobre la renta variable europea en el entorno actual.
La firma explica que, a pesar de la incertidumbre causada por la situación en el país heleno, incluso desde los momentos más duros de la crisis con las especulaciones sobre su salida del euro, las Bolsas han conseguido mantener una fuerte inercia alcista. "Grecia ya no es un riesgo sistémico", asegura Alvargonzález.
El experto recuerda que desde que empezó la crisis griega, el Eurostoxx ha subido un 79%. Y asegura que la situación ahora es muy diferente, con un Gobierno heleno que tiene una posición negociadora mucho más complicada que antes. "Los bancos antes tenían bonos griegos valorados al nominal, pero ahora está descontado que valen muy poco". A su juicio, Alemania ya tiene asumido un eventual abandono de Grecia del euro. "No es que se vaya a producir, pero a la hora de negociar, la opinión pública no va a llevar nada mal esa posibilidad, mientras que antes se pensaba que sería el fin del euro".
Tressis también mantiene una visión optimista sobre la deuda de Atenas y los plazos de pago a los acreedores. Explican que unos 120.000 millones de euros corresponde a instituciones europeas, es decir, con cargo al contribuyente. "No va a hundir a ningún banco", explica Alvargonzález. Y recuerda: "la deuda helena en manos de los bancos a nivel mundial asciende a unos 74.000 millones de dólares. De esa cifra, unos 52.000 millones están en manos de bancos europeos, y de ahí, 35.000 millones en manos de bancos alemanes".
En este sentido, compara la cifra con el rescate a Bankia (unos 22.400 millones entre el primer rescate del FROB y los fondos del MEDE), explicando que "la deuda de Grecia está muy repartida, con una gran parte en instituciones y, lo que está en bancos, está muy repartido y provisionado". Y en los casos en los que el riesgo es mayor, al final es similar al rescate de un banco español. Alvargonzález tiene claro que "a quien hace polvo el Grexit es a Grecia, al menos inicialmente".
Descartada Grecia como riesgo sistémico, Tressis mantiene su firme por la Bolsa europea para este primer semestre, especialmente los parqués alemán y español. "El QE, el bajo coste de la energía, la devaluación del euro y la mejora macroeconómica serán los principales motores de esta clase de activo", explican desde la firma. A su juicio, Wall Street también mantendrá la tendencia alcista, aunque han reducido el peso en cartera en previsión de futuras subidas de tipos "y lo ajustado de algunas valoraciones".