En las Islas Canarias existen rincones de lo más atractivos. Las puestas de sol más bellas del planeta se contemplan desde pequeñas calas o playas infinitas, desde un mirador con un paisaje plagado de conos volcánicos y el Atlántico en el horizonte, incluso desde parajes aislados donde no existen carreteras asfaltadas. Para hacer más cómoda […]
Dirigentes Digital
| 09 feb 2017
En las Islas Canarias existen rincones de lo más atractivos. Las puestas de sol más bellas del planeta se contemplan desde pequeñas calas o playas infinitas, desde un mirador con un paisaje plagado de conos volcánicos y el Atlántico en el horizonte, incluso desde parajes aislados donde no existen carreteras asfaltadas. Para hacer más cómoda y especial la estancia, el archipiélago canario cuenta además con una amplia variedad de singulares casas rurales y modernos hoteles con la mejor oferta en tratamientos relajantes para parejas en centros wellness, con el atractivo de los recursos naturales y los elementos del mar para el uso terapéutico. Por el romanticismo y los beneficios de su naturaleza, las flechas de Cupido apuntan a siete rincones, y alguno más, de las Islas Canarias. Los Jameos del Agua, Lanzarote Ideado por el artista lanzaroteño César Manrique, es un lugar casi mágico en el que relajarse frente al jardín de palmeras y su lago artificial. En el interior de la cueva existe otro lago natural donde habita una especie de cangrejo albino único en el mundo. El auditorio construido en la propia caverna aprovecha la magnífica sonoridad de la gruta volcánica y suele acoger todo tipo de conciertos y eventos para hacer memorable una cita muy especial. En Lanzarote existen también otros lugares románticos como Teguise o la isla de La Graciosa, donde no existen las carreteras de asfalto es ideal para recorrerla en bicicleta. Las Calas del Cotillo, Fuerteventura Este lugar es ideal para relajarse y pasar unos días en pareja lejos de todo alboroto. Incluso en febrero, el clima templado permite disfrutar de la transparencia de sus aguas turquesas y su arena blanca, beneficiadas habitualmente de un bajo oleaje gracias la forma de herradura que forma un arrecife natural. Y si se levanta el viento, existen dos opciones: disfrutar del día en pareja refugiándose dentro de uno de los corralitos –unos pequeños muros circulares de piedra volcánica creados por los residentes- o visitar el bonito pueblo de Betancuria, a menos de una hora en coche desde El Cotillo. Por la noche, si se busca más ambiente en pareja, los también enamorados de los éxitos musicales pueden disfrutar de un cóctel en uno los mejores clubs playeros de Corralejo, en el norte de Fuerteventura, con vistas a la Isla de Lobos. Tratamientos de brilloterapia en Gran Canaria Las Islas Canarias son un verdadero spa al aire libre gracias al clima templado durante todo el año y los recursos naturales del mar, la brisa, la arena y el sol. En Gran Canaria existen numerosos balnearios ideales para los más románticos, donde las algas y el barro se aprovechan para sesiones de talasoterapia; los minerales de las tierras volcánicas para la geoterapia; el aloe vera -que crece favorablemente gracias al clima templado- es la base de los tratamientos de aloeterapia, e incluso el zumo de uvas cultivadas en arenas volcánicas es el recurso de la vinoterapia, muy eficaz para limpiar y purificar la piel y estimular la circulación. Parque nacional del Teide, Tenerife Una de las puestas de sol más hermosas tiene al Parque Nacional del Teide como grandísimo escenario, donde el planeta solar se alinea con la cumbre del volcán para desaparecer tras el pico más alto de España. En ese momento se abren paso una infinidad de estrellas que alcanzan su máximo esplendor cuando cae la noche, gracias a la claridad de los cielos del archipiélago y la ausencia de nubes durante la mayor parte del año. De hecho, es uno de los mejores lugares del mundo para observar el universo, pues la zona está declarada Reserva Starlight. Es el plan perfecto para los románticos que han pasado el día visitando las Pirámides de Güímar y el pueblo de Vilaflor. Valle Gran Rey, La Gomera El Atlántico es el horizonte ideal para contemplar una puesta de sol en el este de La Gomera. El barranco que desemboca en las playas de arena negra de Valle Gran Rey alcanza una belleza extraordinaria cuando los cambiantes tonos anaranjados del atardecer se desvanecen en el océano. Es el rincón perfecto para las parejas que buscan contemplar la naturaleza acariciados por la brisa atlántica mientras sienten que el tiempo se detiene. Mirador de los Andenes, La Palma El interior abrupto de la isla de La Palma desafía a buscar los mejores miradores para contemplar su grandiosa naturaleza. Uno de los más atractivos es el Mirador de los Andenes, a 2.000 metros de altitud, desde donde puede observarse, casi en su totalidad, el cauce del Barranco de las Angustias en el interior del Parque Nacional de La Caldera de Taburiente y la Reserva Integral del Pinar de Garafía. Alquilar un vehículo descapotable es un plan seductor para llegar a lo más alto de la isla en pareja y disfrutar del silencio de los volcanes mirando al infinito. Piscinas Naturales de La Maceta, El Hierro La piscina natural de La Maceta, en el valle de El Golfo, al norte de El Hierro, reúne una combinación de sol, lava y mar que dan sentido a la palabra “placer”. Sus llamados “charcos”, de diferentes dimensiones y todos ellos de agua salada, están protegidos del oleaje, aunque el océano deja de vez en cuando rompientes y entradas de mar espectaculares cuando está bravío. Por eso, esta zona de baño es un atractivo enclave para un fin de semana romántico en pareja.