El ministro portugués de Finanzas, Mario Centeno, se ha impuesto este lunes en la votación del Eurogrupo para elegir a su próximo presidente, en sustitución de Jeroen Dijsselbloem, cuyo mandato concluye el 13 de enero, tras haber perdido su condición de ministro de Finanzas de Holanda. Centeno era el favorito en las apuestas, pero ha necesitado […]
Dirigentes Digital
| 04 dic 2017
El ministro portugués de Finanzas, Mario Centeno, se ha impuesto este lunes en la votación del Eurogrupo para elegir a su próximo presidente, en sustitución de Jeroen Dijsselbloem, cuyo mandato concluye el 13 de enero, tras haber perdido su condición de ministro de Finanzas de Holanda. Centeno era el favorito en las apuestas, pero ha necesitado tres rondas de votación para imponerse a sus rivales, el ministro liberal luxemburgués Pierre Gramegna, el socialista eslovaco Peter Kazimir y la liberal letona Dana Reizniece-Ozola. De este modo, en la primera ronda, Reizniece-Ozola resultó la menos votada y abandonó la carrera por la presidencia del Eurogrupo. En la siguiente, le tocó el turno al candidato eslovaco, quedando emplazados a una tercera ronda Pierre Gramegna y Mario Centeno quien, según la prensa lusa, había alcanzado ocho votos en las votaciones anteriores. El ministro luso ha hecho valer los respaldos, más o menos manifiestos, de Italia, España, Francia y Alemania para conseguir el puesto. España había renunciado a presentar a Luis de Guindos al puesto, reservando fuerzas para la carrera para la vicepresidencia del Banco Central Europeo (BCE), que se decide en mayo. Dado que la votación es secreta, se desconoce cuáles han sido los respaldos que ha recibido cada candidato, que necesitaba del apoyo de 10 de los 19 países de la eurozona para ser elegido. El ya presidente del Eurogrupo contaba con el respaldo de al menos siete países, pero se desconoce qué equilibrios han sido necesarios para su elección. Sin embargo, sí es posible intuir algunos de los apoyos de los candidatos, debido a afinidades geográficas o a la pertenencia a alguna de las familias políticas europeas. Centeno y Kazimir representaban los intereses del Partido Socialista Europeo (PSE), mientras que Gramegna y Reizniece-Ozola se alinaban con los liberales y ecologistas. El Partido Popular Europeo (PPE), que ostenta la presidencia del Consejo Europeo, la Comisión Europea y la Eurocámara, renunció a presentar un candidato propio y se especula con que su apoyo ha sido crucial para elegir al ministro socialista portugués, que contaba con los apoyos de los gobiernos ideológicamente afines. Centeno, al que el ministro alemán Wolfgang Schäuble definió en su día como el Ronaldo del Eurogrupo, es un economista, profesor y ex banquero que cuenta con buena prensa en Bruselas debido a su labor como ministro en Portugal, durante la que el país ha salido del procedimiento de déficit excesivo y ha generado un crecimiento estable. Su mandato comenzará el próximo 13 de enero y será efectivo durante los próximos dos años y medio. Centeno será el tercer presidente del Eurogrupo, el segundo que pertenece al PSE y el primero que no procede del Benelux, a diferencia de sus dos predecesores, el luxemburgués Jean-Claude Juncker y el holandés Jeroen Dijjselbloem.