En su último Outlook sobre el mercado americano, la entidad expone los principales factores que sitúan a Estados Unidos y a la Fed en el punto de mira de los inversores. "En estos momentos existe cierta complacencia en cuanto a las previsiones de los tipos de interés y la perspectiva de los mercados de crédito, […]
Dirigentes Digital
| 09 mar 2015
En su último Outlook sobre el mercado americano, la entidad expone los principales factores que sitúan a Estados Unidos y a la Fed en el punto de mira de los inversores. "En estos momentos existe cierta complacencia en cuanto a las previsiones de los tipos de interés y la perspectiva de los mercados de crédito, que contrasta con una mirada más crítica y objetiva a los últimos datos y acontecimientos", advierten.
Según los expertos de Pioneer, la economía estadounidense está alcanzando una velocidad de crucero, algo que los inversores valoran como se ha visto con los máximos conseguidos en Wall Street. "Se espera que el crecimiento del PIB alcance el 3,4% en 2015. Por su parte, el gasto público, principal causa del mal ritmo de la economía en los últimos años, empezará a contribuir para el crecimiento este año. Además, se espera que el consumo suba y, la deflación, que plantea una amenaza en zonas como Europa, no parece suponer un peligro para EEUU", explican.
A esta visión positiva se suma el crecimiento del crédito bancario, con una tasa anualizada del 7%. Y todos estos datos en conjunto "no resultan compatibles con un entorno de tipos de interés cercanos a cero por mucho más tiempo". En esta línea, los expertos coinciden con el consenso del mercado apuntando al giro en la política monetaria que se está planteando la Fed.
¿Qué pasa en los mercados?
En este escenario, Pioneer considera que las valoraciones en los mercados estadounidenses parecen relativamente caras en todas las categorías, incluidos los bonos corporativos con grado de inversión, los bonos high-yield, los préstamos bancarios y los valores con garantía hipotecaria.
Destaca el hecho de que los activos invertidos en renta fija se han duplicado con respecto a 2008. Y advierten: "por desgracia, esta evolución ha tenido lugar en un momento de caída de la liquidez del mercado, debido a una nueva normativa que limita la capacidad de los bancos de inversión para mantener bonos en sus inventarios y actuar como creadores de mercado". Por eso, a su juicio, el mercado podría verse presionado si los ánimos cambiasen repentinamente.
En este sentido, recuerdan que "en el caso de que la subida de los tipos de interés ocasione grandes salidas de capital de los mercados de crédito, es posible que la liquidez no sea suficiente para que los inversores salgan de manera ordenada". Este es un ejemplo de cómo un cambio de circunstancias puede generar nuevos riesgos, cuyas consecuencias no todos conocen y que, por tanto, merece un análisis detenido por parte de los inversores que han apostado por esta clase de activo en su búsqueda de rendimientos mayores.
En cuanto a la renta variable, las acciones estadounidenses siguen siendo notablemente más atractivas que los bonos por motivos de valoración, según han apuntado los analistas de Pioneer. Sin embargo, "las condiciones de renta variable son cada vez más difíciles y habrá que prestar más atención a ciertos factores y temáticas en 2015".
Pioneer establece que, en general, la renta variable es una oportunidad interesante dentro de los mercados estadounidenses, ya que ofrece una combinación de riesgo y rentabilidad que es más atractiva que la de los mercados de renta fija y de crédito. "Estos podrían sufrir turbulencias, puesto que las decisiones de la Fed les podrían afectar más". Sin embargo, los expertos consideran poco probable que se repitan las rentabilidades excepcionales de los últimos años.